CIUDAD MADERO, TAMAULIPAS.- «Le digo a mi hijo, que no tenga miedo. Que nada le va a pasar nada. Y que él vea lo que se le dijo: «no hay amigos. Esos no son amigos «. ¡Que no tenga miedo! ¡Yo quiero abrazar a mi hijo, ni siquiera le he limpiado sus heridas! Sé que trae un ojo muy mal, que está perdiendo la vista , se que anda cortado, sé que trae muchos golpes en la cabeza».
Es el mensaje que envía, Esmeralda Araceli Cerda Moreno, madre de un joven identificado como Álvaro «N» presuntamente involucrado en el caso del muchacho encontrado inconsciente en la colonia Vicente Guerrero.
La mujer revela que el motivo que desencadenó el incidente fue presuntamente por una mujer.
El pasado 29 de julio a las seis de la tarde, dijo que fue atacado en una vivienda de la Avenida Madero, en la colonia Lázaro Cárdenas.
El incidente se produjo a las seis de la tarde.
Mi hijo corre tras de ellos. Porque cobardemente se fueron
Lo patearon. Casi me sacan un ojo, veo que mi hijo está sangrando de un ojo y salgo y le digo: «¡hijo, vente!» Y mi hijo se va atrás de ellos», dijo.
Posteriormente, se registró, de acuerdo con el dicho de la madre, una persecución que se extendió hasta algún punto en el poniente de la ciudad.
«Posteriormente pasa lo que pasó más tarde. Se los encuentra, se los encuentran y se empiezan a golpear.
Y agregó:
«No nada más mi hijo. Que pongan todos los vídeos.
No, nada más mi hijo lo golpeó. Él también golpeó a mi hijo. Mi hijo llegó aquí casi con el ojo saliendo . Aquí está parte del cachete abierta , sangrando y dijo: «mamá, esto no se vale», dijo.
INJUSTO QUE ACUSEN A ALVARO
La mamá considera injusto que acusen a su hijo, cuando se trató de una situación diferente.
«Ellos se suben a las redes diciendo que mi hijo era un asesino, que mi hijo había empezado. ¡No señores, mi hijo no empezó! Aquí vinieron a querer matar a mi hijo, y yo como mamá, estoy muy molesta, porque de ahí se brincaron a venir a hacer destrozos a la casa.
Horas más tarde, compartió que personas no identificadas acudieron al domicilio y causaron destrozos.
«Tiraron vidrios, vinieron los hermanos de él a amenazarme y diciéndome que mi hijo va a estar aquí tirado muerto. Eso fue ya después a la medianoche. Vinieron aquí a tirarme los vidrios, se metieron. Si, no es porque cierro yo la puerta. Mi madre estaba aquí y mi madre brinca de la cama porque le cayeron todos los vidrios», dijo.
Por José Luis Rodríguez Castro
Expreso-La Razón