CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Las carnicerías del Mercado Argüelles en Ciudad Victoria, con más de 70 años de historia, luchan por sobrevivir en un contexto cada vez más dominado por los grandes supermercados y las compras en línea.
Felipe Reina, propietario de la Carnicería Don Juan, comparte su experiencia y la realidad que enfrentan estos comercios tradicionales.
«Somos hijos de los propietarios originarios», comenta Reina, quien ha estado al frente de su carnicería durante los últimos 20 años, sumando los 60 años que sus padres dedicaron al negocio en el antiguo mercado.
«Antes había al menos 25 carnicerías aquí. Con el tiempo, muchas cerraron; ahora solo sobreviven entre 5 y 10 puestos abiertos».
La desaparición de las carnicerías se debe, en parte, a que los hijos de los tablajeros originales han buscado otras oportunidades lejos del negocio familiar.
«Ellos no siguieron la tradición, buscaron estudios en otros lugares», explica Reina.
Además, las ventas han caído durante una «mala época», marcada por el regreso a clases y la Cuaresma, periodos tradicionalmente bajos en consumo de carne. «Solo esperamos a diciembre», añade con esperanza.
Reina asegura que su carnicería se abastece de carne fresca de la región, que llega los martes y jueves.
«No manejamos carne importada, solo carne fresca. Por lo general, vendemos bistec, carne molida, chicharrón de res o hígado. Cerca de diciembre, ofrecemos cortes más finos para las cenas de familias y amigos».
Actualmente, el precio del kilo de carne de bistec, molida y deshebrada es de 200 pesos.
La situación en el Mercado Argüelles es crítica.
Otro trabajador asegura que el 30% de las carnicerías han cerrado debido a la falta de rentabilidad.
«Entre las altas tarifas de energía eléctrica, las bajas ventas, el alza de insumos y otros factores, ya no es costeable seguir con los negocios», lamenta. Muchos de sus compañeros han optado por cerrar definitivamente.
«Ya no les convenía; era incontable, entre el recibo de la luz y el hecho de que viene poca gente al mercado».
El incremento en las tarifas eléctricas ha sido otro golpe duro para estos comerciantes.
«En los dos últimos meses, los recibos de luz han subido al menos mil pesos, mientras que las ventas se han reducido hasta en un 50%», señala Reina.
Ante esta situación, los tablajeros del Mercado Argüelles hacen un llamado a la comunidad para que visiten el mercado y realicen sus compras allí, contribuyendo así a la recuperación económica del lugar y ayudando a preservar una tradición que ha sido parte de la identidad de la ciudad por generaciones.
Por Raúl López García
EXPRESO-LA RAZON
