ESTADOR UNIDO.- Mientras Tamaulipas se prepara para hacer frente a las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos, Donald Trump cumplió muchas de sus amenazas y en el primer día de su nueva administración declaró una emergencia en la frontera, lo que le permitirá incrementar la seguridad; retomó el programa Quédate en México; canceló el sistema de citas, y confirmó operativos masivos de deportaciones.
“Declararé una emergencia nacional en nuestra frontera meridional, todas las entradas ilegales se detendrán inmediatamente y empezaremos el proceso de (deportación) de millones y millones de extranjeros delincuentes a los lugares de los que vinieron.
Restableceremos la política de permanecer en México, terminaremos con la práctica de ‘atrapar y soltar’ y enviaremos tropas a la frontera sur para repeler la horrible invasión a nuestro país”, advirtió.
Donald Trump dedicó buena parte de su primer discurso a la agenda migratoria.
Felicitó, por ejemplo, al gobernador de Texas, Greg Abbott, por el gran trabajo que ha hecho en la frontera, y también reiteró que ya no permitirá que ”criminales” ingresem a la frontera.
«Todas las personas detenidas serán regresadas a México con el programa ‘Quédate en México’ para detener la ‘desastrosa invasión'», dijo.
La implementación original de este programa ocasionó una crisis migratoria sin precedentes en la frontera tamaulipeca, con miles de extranjeros estacionados en municipios como Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo.
Trump afirmó que toda persona que ingrese de forma irregular a su país será “detenida y deportada de inmediato”.
Esto acabará con la política conocida como Catch & Release, que permite a las autoridades migratorias liberar a un migrante en una comunidad mientras se desahoga su proceso en los tribunales de inmigración.
Al mismo tiempo, ayer se informó que muchos jueces de inmigración de Estados Unidos estaban siendo despedidos.
El presidente pretende terminar con el derecho al asilo para los inmigrantes, uno de los pilares fundamentales de Estados Unidos.
El republicano también ha propuesto pausar durante cuatro meses la reubicación en suelo estadounidenses de refugiados o desplazados por conflictos internacionales.
Esto comenzó a notarse desde los primeros minutos de su gestión. Decenas de miles de migrantes que seguían su trámite de asilo a través de la aplicación CBP One vieron la herramienta dejar de funcionar en sus móviles. Esto deja en el aire a 30,000 personas que tenían agendadas sus citas en las próximas tres semanas.
En municipios de Tamaulipas, se estima una presencia de 2 mil extranjeros que estaban en espera de cumplir con su cita y que ayer quedaron en el limbo jurídico.
Las medidas dedicadas a la frontera permitirán a Trump mostrar mano dura en la gestión de la migración.
Sin embargo, el nuevo Gobierno recibe los números más bajos de la frontera en tres años, cuando la emergencia sanitaria del coronavirus provocó un desplome de la inmigración irregular.
En diciembre se registraron por primera vez menos de 100,000 cruces en la frontera, algo no visto desde enero de 2021.
Los últimos seis meses de Biden registraron además una caída de 70% de los cruces irregulares respecto al mismo periodo de 2023, de acuerdo a los números finales del mandato demócrata.
En el caso de la frontera de Texas con Tamaulipas, la caída fue evidente.
Durante los últimos dos meses, apenas se reportaron 57,862 encuentros, cuando en el mismo periodo del año pasado se registraron 105,197. Esto significa una disminución del 44 por ciento en las zonas del Valle del Río Grande hasta Laredo.
Por principales países de origen de los migrantes irregulares detenidos la reducción fue de 47.5 por ciento en el caso de México, de 57 en el de Venezuela y de 68 en el de Guatemala.
Tamaulipas se prepara
En Tamaulipas, las autoridades estatales y municipales, mantienen abiertos siete albergues en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros en la frontera, pero también en Victoria, la capital del estado y en Tampico en la zona sur del estado.
Sin embargo, ante la posible contingencia que se podría presentar, el Gobierno Federal dispuso otros cinco albergues, con lo que se ampliaría la capacidad de atención, informó Juan José Rodríguez Alvarado, Director del Instituto Tamaulipeco para los Migrantes.
El funcionario precisó que actualmente hay en albergues y casa de migrantes, menos de 2 mil personas extranjeras que están buscando una oportunidad a través de la plataforma CBP One para lograr una cita con un juez federal y poder solicitar asilo humanitario en Estados Unidos.
Se trata de mil 118 adultos y 484 menores de edad que llegaron acompañados de sus padres hasta este punto del país; mayormente hay venezolanos, haitianos, además de otros de países de Centroamérica como Honduras o Guatemala, entre otros.
De acuerdo con el titular del Instituto Tamaulipeco para los Migrantes, es por la frontera de Nuevo Laredo, por donde se lleva a cabo el 40 por ciento de las repatriaciones, el 32 por ciento por Reynosa y el resto por Matamoros.
Las repatriaciones han venido a menos en los últimos años; así, mientras en 2023 los Estados Unidos expulsaron por Tamaulipas a 70 mil mexicanos, el año pasado fueron alrededor de 50 mil, esto es, 20 mil menos.
Sin embargo, ante la amenaza latente de deportaciones masivas, se ha previsto que los albergues cuenten con lo mínimo indispensable para atender a quienes pudieran ser expulsados del vecino país.
Aclarando que, aunque es responsabilidad del Gobierno Federal el tema de migrantes extranjeros, los albergues atenderán por igual, a mexicanos a quienes se buscará enviar, lo antes posible a sus lugares de origen, a través de los convenios que ya se tienen con algunos estados para que paguen los boletos de autobús de sus conciudadanos.
Pero también a los extranjeros a quienes el Gobierno Federal deberá atender a través del Instituto Nacional de Migración (INM) su traslado a los países de origen o alguna otra alternativa como ofrecerles un cambio en su estatus migratorio.
“Independientemente de la condición migratoria que tenga cualquier persona en el Estado, nacionalidad, nosotros estamos este atentos para atender sus necesidades, pero ya la regulación tanto del tránsito, como la estancia de extranjeros en nuestro estado, nuestro país, es estrictamente un tema de regulatorio y es Federal y se atiende a través del Instituto Nacional de Migración”.
Las cifras históricas revelan que durante el anterior gobierno de Donald Trump, las deportaciones fueron a la baja.
“En el periodo de Trump, fue el periodo presidencial que menor repatriación ha habido de mexicanos hacia México”, dijo Rodríguez Alvarado, detallando que entre 2017 al 2021, se repatriaron 766,376 migrantes, de esos, 247,000 ingresaron por Tamaulipas.
“El mayor deportador de Presidentes de los Estados Unidos en su periodo fue Obama (Barack), en su primer periodo (2009-2013), repatrió 1 millón 845,000 migrantes hacia México”.
De ellos, 418 mil se repatriaron por Tamaulipas, mientras que en el segundo periodo de Barack Obama, las repatriaciones sumaron un millón 003,000 connacionales por la frontera mexicana, de los que 279,000 fueron repatriados por Tamaulipas.
“En el periodo de Biden, que acaba de terminar, cerrando a lo que fue el año del 2024, a nivel nacional fueron 841,000 mexicanos repatriados por la frontera, de los cuales, 190, 000 entraron por Tamaulipas”.
Los tamaulipecos deportados fueron 27,904 durante el periodo presidencial de Joe Biden, mientras que en el periodo de Donald Trump, fueron 26,856; el 12 por ciento de los deportados son tamaulipecos, seguidos de los originarios de Veracruz, Guanajuato, Chiapas, Guerrero y el Estado de México.
“En el momento en que se supo que que el Presidente Trump había ganado las elecciones, el Gobernador instruyó para que todas las áreas de Gobierno prepararan los escenarios y de acuerdo a sus facultades y capacidades, los programas que se fueran a requerir para atender tanto a los repatriados a nivel general de todas las entidades como a los repatriados tamaulipecos”.
Aquí, hay varios escenarios que pueden presentarse, “un 51, 55 por ciento van a ser personas que tienen menos de 30 días de haber cruzado a Estados Unidos, entonces las necesidades de este universo de mexicanos es muy diferente a las necesidades de quienes tienen 2, 5,10, 20 años”.
Para los niños que se fueron muy pequeños o incluso nacieron en Estados Unidos y que podrían regresar, la Secretaría de Educación de Tamaulipas (SET) se prepara con los programas para darle la continuidad educativa, la homologación escolar, la atención psicológica y la educación bilingüe.
“Tenemos personas que van a tener cinco años, que traen inversiones, que quieren continuar invirtiendo porque hicieron su capital, pues ahí tenemos una alianza muy fuerte con Finabien (Financiera del Bienestar)”.
Algunos otros, dijo, van a querer autoemplearse, “algunos otros van a querer conseguir empleo, tenemos el programa de certificación de habilidades, que tiene que ver con certificar lo que ellos aprendieron, las nuevas habilidades y el manejo de herramientas”.
Pero también para que adultos puedan obtener certificados de educación básica, además de apoyo psicológico, especialmente para aquellos que tienen desarraigo con el país, “tenemos convenios con la Asociación de de psicólogos para que la reciban de manera gratuita”.
En materia de salud, explicó que la Secretaría estará atenta de aquellos que regresan con padecimientos crónicos, “no se trata nada más, al menos en Tamaulipas decir, oye, pues bienvenido no, aquí tenemos todos estos programas, y eso es una instrucción que dio el gobernador, atender de manera muy humanista”.
Por Perla Reséndez
Expreso-La Razón