El proceso de selección de candidatos para la primera elección judicial de Tamaulipas ha entrado en una etapa decisiva, y por momentos, confusa.
Como sea, lo tres comités de evaluación tienen la obligación de publicar hoy el listado de los aspirantes que pasaron el segundo filtro, denominado de idoneidad, para perfilar la lista que finalmente llegaría a las boletas.
Vale la pena hacer un recuento de lo que ha ocurrido desde el mes de diciembre hasta llegar a este punto.
Luego de recibir más de 2 mil expedientes, el 7 de enero se publicaron las listas de los más de mil perfiles que pasaron el primer filtro, el más sencillo, que correspondía solo en cumplir con los requisitos constitucionales.
El 8 de enero iniciaron las entrevistas con los “semifinalistas”, y rápidamente los integrantes de los comités se dieron cuenta de que el tiempo no les iba alcanzar para reunirse con todos, por lo que pidieron una extensión del plazo al Congreso.
Finalmente, el calendario quedó así:
El 22 de enero es la fecha límite para publicar el listado de quienes consideran idóneos para participar en la elección.
Después, según el nuevo texto de la convocatoria, los comités “depurarán dicho listado mediante insaculación pública para ajustarlo al número de postulaciones para cada cargo por cada Poder, observando la paridad de género, y publicarán los resultados en loa estrados habilitados a más tardar el 24 de enero del 2025”.
Luego, el 27 de enero a más tardar, deberán ser entregados a los tres poderes que tendrán que aprobarlos antes del 31 de enero.
Lo que se entiende de esta redacción, aprobada por la Comisión Permanente del Congreso del Estado, es que después del filtro de idoneidad, los comités deben llevar a cabo una insaculación a esos nombres para que finalmente resulte la lista de quienes competirán por los 147 cargos que están en juego.
Sin embargo, en la conferencia organizada ayer por el Congreso del Estado, uno de los integrantes del Comité del Poder Legislativo, aseguró que no se llevará a cabo un proceso de insaculación pública, un concepto que se define en nuestro idioma como un sorteo.
Consultado sobre cómo se llevará a cabo este procedimiento, el doctor Edgar Martínez Báez, quiso ser muy claro: “no es tómbola”.
Detalló: “el comité no va a someter un papelito y va a sacar a la suerte… va a estudiar nuevamente los expedientes y se van a filtrar los que tengan el promedio”.
Es posible que se haya referido a que los comités de evaluación declararán idóneos solo a la cantidad exacta de aspirantes para competir por los 147 cargos, para que así ya no haya necesidad de recurrir al azar.
Difícil saberlo, pero vale la pena que se aclare y se transparente al máximo posible lo que ocurra a partir de hoy, en la etapa decisiva de un proceso histórico y no exento de complejidades.
POR MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES