Cuando el médico nos manda algún medicamento, es común preguntar si podemos tomar alcohol. Sin embargo, pocas veces cuestionamos si pueden pasarse con cualquier líquido. Aquí te contamos qué medicamentos no tomar con leche y por qué.
A la hora de tomar una pastilla, creemos que cualquier líquido funciona. Sin embargo, lo que no sabemos es que algunas bebidas pueden interactuar con los medicamentos, alterando su efectividad e incluso causando efectos secundarios.
Una de ellas es la leche. Esta suele ser la favorita de quienes tienen problemas estomacales, como gastritis, pues se considera un líquido protector. Asimismo, hace menos desagradable el sabor de algunas pastillas que dejan restos en la lengua.
Finalmente, es muy práctico cuando se trata de niños que deben tomar pastillas en el desayuno. Sin embargo, aunque parezca inofensivo, algunos de los componentes de este lácteo pueden interactuar con las medicinas, afectando eficacia.
¿Por qué no se debe tomar pastillas con leche?
Aunque no aplica con todos los medicamentos, la razón por la que no se recomienda pasarnos las pastillas con leche, es por algunos de sus componentes. Elementos como el calcio, magnesio y la caseína, aunque nutritivos, pueden interactuar negativamente.
En primer lugar, el calcio puede formar compuestos insolubles con algunos medicamentos, impidiendo que el cuerpo los absorba correctamente. Algo similar ocurre con el magnesio y otros minerales.
Estos se unen a los fármacos, reduciendo su biodisponibilidad, por lo que no tendrán el efecto esperado.
Finalmente, su contenido de grasa y proteínas, pueden alterar la velocidad con que se disuelve el medicamento, por lo que comenzará a actuar más tarde de lo esperado.
¿Qué medicamentos no se deben tomar con leche?
Antibióticos. En específico, se refiere a los del grupo de las tetraciclinas, como la tetraciclina, doxiciclina y minociclina, y las fluoroquinolonas (ciprofloxacino y levofloxacino).
De acuerdo a la Red de Centros de Envenenamiento de Texas, estos fármacos se unen al calcio de la leche y otros lácteos, como el yogur y el queso, por lo que se reduce su absorción intestinal y, en consecuencia, su efectividad.
Para evitarlo, lo mejor es evitar beber leche una o dos horas antes y después de tomar estos antibióticos.
Levotiroxina. Es muy común para el tratamiento del hipotiroidismo, sin embargo, el calcio y la caseína de la leche pueden interferir con su absorción. La recomendación general es tomarla con el estómago vacío y evitar la leche de 30 a 60 minutos después.
Suplementos de hierro. El hierro interactúa con el calcio, por lo que estos suplementos no deben tomarse con leche, pero tampoco combinarse con otros alimentos ricos en este mineral.
Lo mejor es tomarlos con agua y esperar al menos dos horas antes de consumir lácteos.
Medicamentos para la osteoporosis. En especial se refiere al alendronato, utilizado para tratar la pérdida de masa ósea, pues el calcio reduce su absorción.
Para evitarlo, toma estas medicinas con agua simple al despertar y espera 30 minutos antes de consumir leche o lácteos.
¿Qué otras bebidas no deben mezclarse con medicamentos?
Jugo de toronja, pues contiene furanocumarinas, compuestos que inhiben una enzima del hígado, responsable de metabolizar muchos medicamentos. Esto puede hacer que el medicamento permanezca más tiempo en el organismo, aumentando el riesgo de toxicidad.
Aunque aplica en general, es importante tener especial cuidado si tomas estatinas, antihipertensivos o inmunosupresores.
Bebidas con cafeína. No solo el café, también el té negro y algunos refrescos, pueden intensificar los efectos de medicamentos estimulantes o interferir con ansiolíticos y medicamentos para el insomnio.
Algunos ejemplos de medicamentos que no se deben mezclar con cafeína, son: antidepresivos, benzodiacepinas y teofilina.
Alcohol. Según el medicamento, el alcohol puede tener diferentes efectos, desde aumentar la somnolencia, hasta causar reacciones peligrosas y dañar el hígado.
Por esa razón, se recomienda evitar el alcohol en muchos tratamientos, especialmente con analgésicos, antibióticos, antidepresivos y anticoagulantes.
Recomendaciones para tomar los medicamentos de forma correcta
Toma tus medicamentos siempre con agua natural, es el único líquido que no interfiere con la absorción de ningún medicamento. Solo cámbialo si el médico te indica utilizar otra bebida.
Respeta los horarios y dosis indicadas. En caso de olvidar una dosis, nunca lo compenses tomando una doble, al menos que tengas autorización médica.
No tritures ni partas las pastillas sin indicación, pues algunos medicamentos tienen recubrimientos especiales para proteger el estómago o liberarse lentamente.
Evita los alimentos que puedan interferir con tus medicamentos. Al momento de que un médico te recete algo, pregúntale si debes llevar una dieta especial o no comer ciertos alimentos junto con la medicina.
Guarda tus medicamentos en un lugar fresco y seco, de esta forma mantienes intacta su efectividad. En caso de requerir refrigeración, no lo dejes a temperatura ambiente.
Avísale al médico sobre todos los medicamentos, suplementos y productos naturales que tomas, pues algunas combinaciones pueden interferir e incluso ser peligrosas.
Evita el alcohol si estás en algún tratamiento médico.
Aunque parezca que cualquier bebida sirve a la hora de pasarnos una pastilla, no siempre es así. Evita tomar estos medicamentos con leche, para no alterar su eficacia o tener algún efecto secundario.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR