Padecer alguna enfermedad es una experiencia agotadora para el cuerpo, pero también para la mente. Sin importar la gravedad del padecimiento, es una condición que genera estrés ante la presencia de signos y síntomas que no son comunes; las personas enfermas se estresan por no saber qué les ocurre, qué tan grave puede ser y cómo se aliviarán de esa enfermedad, además de que su dinámica cotidiana se altera al tener que pausar sus actividades para ir al médico o para descansar.
Pero aunque lo más común sea acudir al doctor para recibir tratamiento y sanar, hay quienes no pueden hacerlo; no porque no quieran, sino porque algo más se los impide: el miedo. ¿Qué dice la psicología de estas personas? En algunos casos, este temor puede ser leve y quienes lo experimentan pueden acceder a ir a una clínica u hospital para ser atendidos, pero en otros el miedo es excesico incontrolable; a esta condición se le conoce como latrofobia.
La latrofobia se define como la aversión persistente, anormal e injustificada a los médicos o al personal de la salud en general. En casos extremos, las personas con latrofobia manifiestan un rechazo a las acciones más básicas de la práctica médica, como la toma de muestras para análisis, la toma de signos vitales e incluso el consumo de medicamentos.
¿Cómo distinguir un temor común de una fobia?
De acuerdo con una publicación del portal especializado Psicología y Mente, hay algunas características que hacen posible diferenciar un miedo común a ir al doctor de la latrofobia:
El temor fóbico es desproporcionado en comparación con la amenaza real. Es decir, el temor de las personas a padecer el dolor de una jeringa, por ejemplo, es excesivo.
Se trata de un miedo irracional. Las personas no pueden explicar de manera racional o lógica el miedo que experimentan; algunas, incluso, admiten que su temor no tiene sentido, pero no pueden evitar sentirlo.
Es un miedo incontrolable. Quienes atraviesan por episodios de latrofobia no pueden evitar los sentimientos de ansiedad, ni la aparición de pensamientos intrusivos que alimentan dicha ansiedad.

¿Se puede tratar la latrofobia?
Los psicólogos, existen algunos tratamientos que pueden contribuir a disminuir los síntomas del temor irracional a los médicos. Mediante técnicas de reestructuración cognitiva, los profesionales de la salud mental pueden ayudar a estos pacientes a deshacerse de los pensamientos irracionales que los llevan a padecer latrofobia.
Asimismo, Psicología y Mente refiere que un tratamiento conocido como desensibilización sistemática, en el que la persona se expone mentalmente y de manera gradual a las situaciones que le generan su fobia, acompañado de técnicas de relajación, resulta efectivo.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO




