CIUDAD MADERO, TAMAULIPAS.- Tras casi un mes de esperar una cirugía que nunca se concretó, Juan Alfredo Bernal Castillo, derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ciudad Madero, falleció la noche del viernes 3 de octubre a los 67 años de edad. Su familia anunció que interpondrá una denuncia penal por presunta negligencia médica, al considerar que su muerte fue consecuencia directa de una atención tardía e ineficiente.
Su esposa por más de 40 años, Faustina Rodríguez Cruz, y su hija, Alma Bernal Rodríguez, narraron hoy desde el funeral de Juan Alfredo en Tampico que el derechohabiente fue atendido inicialmente en la clínica 38 del IMSS, donde le diagnosticaron gastritis y colitis. Sin embargo, un especialista particular detectó posibles tumores en el hígado y recomendó regresar al Seguro Social para estudios más completos. Desde entonces, comenzó un largo peregrinar entre análisis, ayunos y promesas de una cirugía que nunca llegó.
“Se murió de hambre y se murió reventado por dentro. Fue una muerte muy triste. El mismo director me dijo que su doctor estaba de vacaciones”, relató la viuda, entre lágrimas.
Expresaron que durante semanas su esposo permaneció en ayuno, esperando un procedimiento que era urgente, mientras los médicos posponían la intervención, por ausencia del especialista además de afectaciones al paciente cuando era trasladado por elevador.
La familia afirmó haber acudido con el director de turno del Hospital General No. 6 para pedir atención inmediata, pero el caso se mantuvo sin resolrmaneció
“Él no comía nada, estaba débil y los niveles de glucosa bajaban cada día, lo dijimos una y otra vez”, explicó su hija.
El jueves, al ver su deterioro, lo trasladaron a su casa en la colonia Insurgentes de Tampico, siendo anoche cuando fue llevado de nuevo al hospital, donde finalmente perdió la vida.
Faustina Rodríguez aseguró que su esposo incluso resultó lesionado durante una placa diagnóstica:
“Empezó a vomitar sangre después del estudio. Lo reventaron por dentro”, denunció.
Por ello, exigió justicia y anunció que recurrirá a las instancias legales correspondientes para que el caso no quede impune.
La muerte de Juan Alfredo Bernal Castillo deja al descubierto una herida abierta en el sistema de salud: la necesidad urgente de garantizar atención oportuna y humana a los pacientes. Su historia, marcada por la espera y el sufrimiento, se ha convertido en símbolo del reclamo de muchas familias que piden respuestas y justicia ante un sistema que, una vez más, llegó demasiado tarde.
Por. Cynthia Gallardo
La Razón




