TAMAULIPAS, MÉXICO.- El balance del sector agrícola en 2025 presenta claros contrastes en Tamaulipas, con avances productivos importantes, pero limitaciones económicas derivadas de los bajos precios y la ausencia de apoyos oficiales. Así lo informó Miguel Ángel Huerta Lara, presidente de la Unión de Citricultores del Estado de Tamaulipas “Emiliano Zapata”.
El ciclo primavera–verano 2025 concluyó antes de lo habitual debido a un temporal extraordinario. Las intensas lluvias asociadas a la temporada de ciclones y huracanes recargaron de manera significativa los suelos, lo que permitió un desarrollo favorable de los cultivos, principalmente en las zonas citrícolas.
Huerta Lara destacó que las condiciones climáticas adelantaron las labores agrícolas y favorecieron la siembra.
“Se iniciaron las trillas desde octubre por el excelente temporal; la humedad llegó a tiempo y los agricultores pudieron sembrar en las mejores condiciones”, señaló.
La humedad acumulada impactó de forma directa en los rendimientos y en la floración, factor determinante para la producción de toneladas de naranja por hectárea. Para el dirigente, estos resultados colocan a 2025 como un año positivo en términos productivos para el sector agrícola tamaulipeco.
No obstante, el buen volumen de cosecha no se reflejó en mayores ingresos. Los precios del mercado se mantuvieron bajos durante el cierre de la temporada, lo que limitó las ganancias de los citricultores.
“La temporada cerró en cinco mil pesos por tonelada; descontando gastos, quedan unos 3 mil 300 pesos libres, un desplome de precio, pues se vendía en 13 mil”, explicó.
A pesar de este escenario, los productores lograron sostener un equilibrio financiero.
“Si no ganamos, tampoco perdimos, y eso ya es ventaja en agricultura”, reconoció Huerta Lara.
En el sector ganadero, el panorama también resulta favorable. La abundancia de pastos y la humedad en los potreros garantizan alimento suficiente para el ganado al inicio de 2026. En las áreas donde se trilló sorgo, los rebrotes permitieron la obtención de pacas adicionales, lo que confirma la fertilidad de los suelos.
“Arriba de 90 pesos por un becerro de 200 kilos, bastante bueno, bastante importante”, comentó.
Aunque se prevé un ligero ajuste a la baja en el precio del ganado durante los primeros meses de 2026, el líder agrícola consideró que se trata de una situación temporal con posibilidad de recuperación. Sin embargo, subrayó que el principal reto continúa siendo la falta de apoyos gubernamentales, sobre todo federales.
“Hace falta que se activen programas de mecanización y modernización de maquinaria, como sembradoras de precisión o equipos para ensilar forraje”, concluyó.
Por. Raúl López García




