BANGKOK, Tailandia.- El epicentro de las ceremonias fue la provincia de Aceh, en Indonesia, punto más cercano al terremoto marítimo de 9,3 en la escala Richter que dio origen al tsunami y donde 170.000 personas perdieron la vida el 26 de diciembre de 2004.
La catástrofe en esa parte de Indonesia fue de tal magnitud que determinó la firma de la paz entre la guerrilla independentista musulmana y el Gobierno, tras décadas de lucha armada.
Familiares de víctimas y supervivientes se reunieron en una oración en la mezquita de la capital Banda Aceh, uno de los pocos edificios que se mantuvo en pie y sirvió como refugio para alojar a los damnificados en los días posteriores al desastre.
Los actos de conmemoración en Banda Aceh incluyen exposiciones fotográficas en el Museo del Tsunami (creado en 2009) muestras de arte tradicional, y terminarán mañana con una carrera de diez kilómetros a lo largo de las zonas de la ciudad que más sufrieron el golpe de las olas de hasta 30 metros.
Otro de los actos principales tuvo lugar en Khao Lak, un popular destino turístico de Tailandia donde se leyó poesía, encendieron velas y pronunciaron oraciones en varios credos en honor de los fallecidos.
El primer ministro tailandés Prayut Chan-ocha, que llegó al poder el 22 de mayo pasado con un golpe militar, depositó una ofrenda floral a las víctimas delante del barco policial 813 de la Marina tailandesa, símbolo de la catástrofe al quedar varado a unos tres kilómetros de la costa.
En la India, las ceremonias se realizaron principalmente en el estado sureño de Tamil Nadu, donde asociaciones de pescadores decidieron no salir al mar en señal de luto y en la que familiares de las víctimas arrojaron leche al océano como ofrenda.
Una misa en Idinthakarai, en la zona costera, con población cristiana, un minuto de silencio en Nagapattinam, carteles con fotos de los muertos y desaparecidos, ofrendas con coronas de flores y velas, y procesiones silenciosas en Velankanni o Puducherry recordaron también a las víctimas.
Por su parte, el gobierno de Sri Lanka eligió este año como lema “Sri Lanka Segura, unámonos para erradicar desastres” en el Día Nacional de la Seguridad que desde 2006 se organiza cada 26 de diciembre.
En ese país el acto más emotivo fue la realización del viaje en tren del Ocean Queen Express, en el que 1.700 personas fallecieron cuando fue arrastrado por el tsunami mientras circulaba entre las ciudadades de Colombo y Peraliya y para el que se reconstruyeron la locomotora y dos vagones.
Los recuerdos también tuvieron lugar en países europeos que perdieron ciudadanos durante la catástrofe de 2004, especialmente Suecia, Alemania y Austria.
El terremoto de 9,3 en la escala Richter y 10 minutos de duración que dio origen al tsunami se produjo frente a las costas del noroeste de la isla de Sumatra (Indonesia), a las 6.58 hora local y a unos 10 kilómetros de profundidad.
Las naciones más afectadas fueron Indonesia, con 170.000 muertos y desaparecidos, Sri Lanka, con 30.000; la India, con 16.000; y Tailandia, con 8.200.
Las imágenes de las olas gigantes conmocionaron rápidamente a todo el mundo por su rápida circulación vía Internet y modificaron el sistema de alerta de tsunamis, un fenómeno del que casi no se hablaba hasta antes de 2004.
Con información de Telam