CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Aunque no han existido agresiones ni amenazas en el proceso electoral, los partidos políticos y candidatos reconocieron que existen zonas ‘vedadas’ por la inseguridad para hacer campañas.
Consultados sobre este problema en las campañas, reconocieron que existen colonias en Nuevo Laredo, Camargo, Reynosa, Matamoros y en la vasta zona rural de San Fernando, donde han recibido «recomendaciones» de grupos para no realizar proselitismo donde involucren imágenes que «les perjudique».
Los candidatos y equipos de campaña en el PAN, PRI, PRD y PT a quienes se consultó, admiten que no han registrado incidentes que lamentar, pero no han descartado la posibilidad de solicitar a la autoridad electoral y estatal que destine mayor seguridad para todos los candidatos en las zonas que tienen más altos índices de inseguridad donde se realizan actos de campaña.
Aunado a las asfixiantes reglas del INE como trabajan, los candidatos tienen que salir a cumplir lo que han llamado «códigos de prevención para su seguridad».
El presidente de Acción Nacional, César Verástegui y del PRI, Rafael González Benavides, así como Alberto Sánchez Neri, del PRD y Alejandro Ceniceros del PT, reconocen que las condiciones de inseguridad no han frenado la campaña.
«No hemos detenido nuestra marcha, estamos haciendo una campaña normal y la seguridad está en manos de las autoridades», señala el líder del PRI.
Sin embargo, existen lugares como el municipio de Camargo, donde la tensión crece entre los equipos de campaña que acompañan al candidato. En los techos de las casas o negocios, hay hombres armados, «no dicen nada, pero te observan».
Mier y Miguel Alemán están tranquilos, reconocen los equipos de campaña de los candidatos del PAN, PRI y PRD que fueron entrevistados sobre el tema, aunque condicionan que exista discreción sobre la fuente.
«Así iniciamos campaña, nos han respetado, pero ahí están, nos observan, no es fácil, y pues no le ha pasado nada a nadie, ni a las candidatas, así que, ahí vamos».
Estos municipios de la frontera chica, que integran parte del distrito uno, tienen la cabecera municipal en Nuevo Laredo y ahí existen colonias donde las candidatas y candidatos han entrado y al menos al PAN y al PRD, les han ‘recomendado’ que cuiden las fotos, de preferencia «no tomen fotos donde salen casas», les dicen.
Quienes han enfrentado esta recomendación, reconocen que han llegado a las colonias, sin querer, donde se advierte que existe actividad delictiva.
En Nuevo Laredo existen colonias como «Villas de San Miguel», «Reservas Territoriales», «Nogal», «Infonavit» y los kilómetros del 13 al 22 donde los han recibido con reservas.
Yahleel Abdala Carmona, candidata del PRI a diputada federal recorre las calles sin seguridad, lo mismo que Laura Zárate de Acción Nacional.
«Pensamos que lo de Reynosa nos iba a repercutir y no ha sido así, andamos sin seguridad y en lo particular, Yahleel ha dicho que no le interesa tener vigilancia en sus eventos, porque no hay una ligera intención que nos pueda pasar algo».
El equipo de campaña de Ramiro Salazar en el municipio de Matamoros, asegura que «no nos hemos detenido para entrar a ninguna parte, pero sí existen zonas muy complicadas», reconocen.
Hasta hoy, añaden, no han registrado ningún acto donde impidan al candidato del PAN hacer campaña.
«Se dan sus vueltas y sólo están observando, pero no hay ningún tipo de agresión, ni de amenazas, además que tomamos las precauciones que se ameriten», detallan coordinadores del PAN.
En la cabecera del IV distrito de Matamoros, existen colonias como «La Palangana», «Loma Alta», «México Agrario», entre otras, donde las condiciones para hacer campaña son difíciles, pero no han impedido llegar hasta la gente.
Reynosa vive un escenario similar, pero el miedo se apoderó de muchos candidatos y el 17 de abril decidieron suspender campañas.
«En Reynosa sí está bien difícil, hay colonias donde hay que pedir permiso con tiempo o avisar que el candidato o la candidata estarán en campaña», asegura.
Reconocen que la delincuencia no ha pedido nada, pero hay un ambiente tenso. En el municipio de Río Bravo también se vive este problema pero en otros niveles que, según la gente de Acción Nacional, no corre el riesgo que pase algo contra los candidatos.
Sin embargo, en una conversación reciente con el alcalde de San Fernando, Mario de la Garza, reconoció que el riesgo que se vive en zonas rurales del tercer distrito en este periodo de campañas.
«Ese problema lo tenemos ahí», señala, al tiempo reconoce en las fuerzas federales, el trabajo de vigilancia, y destaca que no ha pasado nada que atente contra los candidatos o su equipo.
Las zonas de Burgos, Méndez, el área rural de San Fernando, González Villarreal, son lugares que preocupan a los candidatos y sus equipos de campaña.
El 17 de abril, el coordinador estatal del Partido del Trabajo, Alejandro Ceniceros Martínez, quedó atrapado entre el fuego y los bloqueos que se registraron en la ciudad de Reynosa, el día que se desató la violencia por la detención de uno de los jefes delictivos en este municipio.
Ceniceros reconoce que las actividades de campaña se detuvieron y hasta hoy, se hacen con «mucho cuidado».
Rechaza que los candidatos tengan que salir a campaña con seguridad pública o privada. «El Estado debe garantizar la seguridad para todos, ¿qué de especial tienen los candidatos, para darles seguridad especial?» se cuestiona uno de los líderes del PT.
