El caso de Lorenzo Córdova, Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral, merece una reflexión más apegada a la realidad que a la alharaca oportunista en la cual se han ventilado sus opiniones.
Sin duda el funcionario merece la reprobación general por sus ideas a todas luces denigrantes de nuestras etnias, pero sin duda también, nadie lo puede acusar de haberlas manifestado en un foro público y mucho menos de haber aplicado esa visión en el cumplimiento de su responsabilidad oficial.
Me pregunto: ¿Quién de nosotros no se ha pitorreado en privado de alguien o de algo como lo hizo don Lorenzo?
Seamos sinceros por favor. En los círculos de amigos nadie o muy pocos ofrecen caras largas a los chistes ofensivos sobre indígenas, sacerdotes, gays, adúlteros, héroes nacionales y en un exceso vergonzante, hasta de minusválidos. La mayoría festeja esas barbaridades y a quien los echa a rodar, tampoco nadie lo llama racista, anticristo, misógino o traidor a la patria.
Por una razón: Porque lo hacen en privado. Esa zona que sólo pertenece a unos cuantos o a uno solo y en la cual ninguna ley prohíbe externar opiniones.
Hoy, esa zona privada de Córdova –aunque sea indigna– fue violentada en forma ilegal y con un fin doloso incuestionable a través del espionaje telefónico. Mañana puede ser usted, su vecino o su servidor.
Y lo más probable, es que sea por un chiste de mal gusto…
ESTRATÉGICO
La visita que ayer realizó el Presidente Enrique Peña Nieto a Tamaulipas, específicamente a Reynosa, tiene en la visión de quien esto escribe, dos ángulos que deben señalarse con colores vivos.
Uno de ellos se desprende de las palabras del gobernador Egidio Torre Cantú, durante su intervención en el evento realizado, en donde el Ejecutivo estatal marcó en forma tácita la razón del renovado apoyo presidencial a nuestra Entidad:
“La diversidad y riqueza de nuestras regiones, así como su posición estratégica en el contexto nacional, generan retos y desafíos para la tranquilidad de los tamaulipecos”. Más claro: por esa ubicación, Tamaulipas sigue siendo vital para México. El Presidente lo sabe y está con los tamaulipecos.
El segundo es la austeridad republicana con el cual se llevan a cabo estos eventos. Cálidos y efusivos, pero sin estridentismos.
Me gusta esta forma de trabajar del Presidente…
IDEA CON PATERNIDAD
Ayer se publicó una nota en la cual el Infonavit dio a conocer que echará a andar en Victoria –con seguridad lo harán en otras ciudades– un programa de desarrollo habitacional para recuperar zonas urbanas, mediante la llamada “vivienda vertical”, para aprovechar al máximo los espacios pequeños y sin uso que sean susceptibles de incorporarse a esas acciones.
La noticia es positiva, pero el planteamiento no es original.
En su paso por la Secretaría de Desarrollo Social del Estado, su entonces titular, Homero de la Garza Tamez, impulsó con vigor esa modalidad constructora e hizo todo lo que estuvo a su alcance para ponerla en práctica. Lamentablemente el tiempo no le alcanzó, pero la paternidad de la idea ahí quedó.
Esto es una muestra más de un viejo refrán mexicano:
No siempre quien corretea a la liebre es quien la alcanza…
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