EL MANTE, Tamaulipas.- El testamento es la declaración voluntaria de una persona expresando lo que quiere que se haga con sus bienes después de su fallecimiento; es un acto sometido a ciertos requisitos de forma y en el que necesariamente consta de la institución de uno o varios herederos; el notario público Núm. 194 en Mante, Manuel Álvarez Montemayor, reconoció que la cultura del mexicano no ha logrado incorporar al testamento como un instrumento para la asignación de bienes cuando la persona ha fallecido.
Revela el notario que anualmente se logran atender de 20 a 30 peticiones de testamento, cifra mínima a comparación con el área de atención y el número de habitantes.
«El testador relaciona la idea de escribir su testamento con la muerte y nadie se quiere morir», destacó el abogado; esta es una de las principales razones que impiden a una persona plasmar su última voluntad y que viene a solucionar muchos de los problemas en las familias.
La recomendación que se hace es para que todos los interesados se acerquen a un notario, que le cuestionen sobre los pros y los contras que le permiten el solicitar su testamento; de esta manera habrá de reducir las posibilidades de disputa en las familias, pues en ocasiones aunque exista un testamento, si los familiares no están de acuerdo con la voluntad del fallecido pueden impugnar.
En este último caso, dijo, siempre se privilegiará respetar la última voluntad del fallecido, pero es un derecho del cual se puede hacer uso.
Durante el mes de septiembre las notarías del país ofrecen un descuento importante en el trámite, a fin de hacer conciencia en los ciudadanos y recurrir a este procedimiento antes de que ocurra una muerte y no se haya decidido a voluntad el reparto de sus bienes.