MÉXICO, DF.- A ningún padre le gusta que sus hijos sean condenados, y mucho menos si es a causa de «pecados» ajenos.
Por eso, al productor José Alberto Castro le molesta que sus hijas Sofía, Fernanda y Regina, producto de su matrimonio con Angélica Rivera, sean criticadas por lo que hacen o dicen, simplemente por ser hijastras del Presidente Enrique Peña Nieto.
«Me duele que la gente no tenga criterio, que se pueda ensañar con adolescentes, con gente que está haciendo su vida normal, que no tiene ningún tipo de responsabilidad.
«Que lo hagan nada más por insultar, ésa es la parte que me causa molestia. Pero también entiendo que es la capacidad de esa gente», compartió en entrevista Castro.
La más señalada durante los últimos años ha sido Sofía, la mayor, pues además es actriz y sus apariciones en público son más constantes.
Pero él les aconseja que disfruten su vida y tomen conciencia del papel que desempeñan el Presidente y Rivera.
«Que no se tomen las cosas a pecho ni se lleven tampoco partes amargas a su vida personal por causa de comentarios absurdos o estúpidos, en los que ellas no tienen ninguna responsabilidad», agregó.
Para «El Güero», su tarea como padre ha sido apoyarlas en sus decisiones y guiarlas, sobre todo ahora que Sofía es actriz y que Fernanda se interesa por la música.
«Uno, como padre, lo que quiere y espera es darle la oportunidad a sus hijos de que se desarrollen en lo que quieren ser. Por mí hubiese querido que fueran médicos, astronautas o físicos, pero no, es lo que ellas quieran».
El productor dijo que desea pronto trabajar en un melodrama con Sofía, pero no es con la única de su familia con la que está ansioso de colaborar, pues quiere repetir mancuerna con su hermana, Verónica Castro.
«Es alguien que tiene mucho que dar en la pantalla. Depende mucho de lo que quiera hacer, cómo y con quién quiera trabajar. Es mi hermana, y lo que soy y he aprendido en este trabajo se los debo a ella», añadió.
Ya sea en un melodrama o en algún programa de variedad, Castro espera que ese proyecto llegue pronto, sobre todo ahora que inauguró Entrelíneas, una empresa incubadora de producciones literarias.
«Ver a Verónica interpretar, me encanta. Para mí, es de las actrices y de las mujeres dentro de esta profesión que más respeto y admiro».