19 diciembre, 2025

19 diciembre, 2025

Cerca eléctrica mata a señora

Humilde ama de casa andaba chapoleando en el patio de su casa y debido a que resbaló, se agarró de la cerca de su vecino sin imaginar que estaba electrificada

MATAMOROS, Tamaulipas.- Insólita muerte tuvo una ama de casa al sufrir una mortal descarga eléctrica al agarrar la cerca electrificada que instaló su vecino para evitar más robos en el domicilio que utiliza como bodega de su minisúper.

La tragedia ocurrió minutos después de las 16:00 horas en el patio trasero de la vivienda marcada con el número 321 de la calle Puerto Loreto Sur esquina con Encino del fraccionamiento Palmares de las Brisas.

La dama que lamentablemente falleció a causa de la descarga eléctrica llevaba por nombre Martha Eugenia Estrada Vázquez, de 45 años, quien apenas tenía 7 días de estar viviendo en dicha morada, propiedad de su hija Vannesa Estrada.

Eugenia no estaba enterada de la seguridad que puso el vecino para evitar los cuantiosos robos que ha sufrido.

 

LOS HECHOS

En datos recabados en el lugar de los hechos estableció que la mujer se encontraba cortando el zacate del patio trasero de la vivienda.

Andaba en compañía de su nieto de 6 años, hijo de Vannesa Estrada. Al momento que la dama estaba «chapoleando» se le atoró un pie entre el lodo y para no caerse se agarró de la cerca  de la casa continua que es utilizada como bodega de un minisúper.

La dama nunca se imaginó que la malla de alambre estaba electrificada, sufriendo la mortal descarga eléctrica.

Su nieto se percató de lo sucedido y quiso rescatar a su abuelita, pero al tocarla  sintió una pequeña descarga  y mejor decidió pedir ayuda.

El menor corrió a la casa de su tía María Gloria Estrada, hija de la occisa, para informarle lo que había pasado a su abuelita.

Enseguida María le dijo que su esposo José Ángel que fuera a auxiliar a la mujer.

«Fui de inmediato a la parte trasera de la casa donde se encontraba mi suegra para tratar de auxiliarla, pero al llegar ya estaba sin vida», declaró José Ángel.

Quien identificó a la occisa fue su esposo, José Antonio Martínez Leyva, de 43 años, residente del mismo domicilio.

Antonio reveló al ser entrevistado que apenas su esposa tenía 7 días de estar viviendo en dicha morada que le prestó su hija.

Señaló que no estaban enterados que el vecino tenía la cerca electrificada.

 

EL REPORTE

Los primeros que recibieron el reporte de la tragedia  fueron los elementos de Protección Civil, quienes de inmediato se trasladado hasta la mencionada vivienda.

Cuando llegaron comprobaron el llamado de emergencia.

Los paramédicos procedieron a revisar a la mujer y comprobaron que ya estaba sin vida.

Posteriormente le dieron aviso a las autoridades correspondientes. Minutos después arribaron los elementos de la Policía Ministerial del Estado acompañados del Agente Primero del Ministerio Público Investigador del fuero común, el licenciado Guadalupe Bernal Castillo, quien fue el encargado de dar fe del cadáver.

 

EL RESPONSABLE

En ese mismo momento los ministeriales se entrevistaron con Lázaro García Zamudio, de 62 años, propietario del mini súper «Vannesa» ubicado en la calles y fraccionamiento ya mencionados, marcado con el número 564.

Al comerciante lo trasladaron a la Procuraduría General de Justicia del Estado en calidad de presentado para que rindiera su declaración correspondiente.

Zamudio le hizo saber a las autoridades que la propiedad que aseguró con la  cerca electrificada está frente a su negocio y la utiliza como bodega.

Dijo que en varias ocasiones le han robado y por eso se vio en la necesidad de poner la cerca eléctrica para que ya no le siguieran vaciando su bodega.

«Nunca tuve la intención de matar a nadie, sólo lo hice para asegurar mi mercancía, porque ya estaba harto de tanto robos debido a que no hay vigilancia», agregó.

También añadió que está conciente de la tragedia y está dispuesto a llegar a un arreglo con los familiares de la víctima.

«Una de mis empleadas me fue a avisar que una señora se había electrocutado con la cerca y enseguida salí de la tienda y le dije a un vecino que bajara la corriente de la casa, pero fue demasiado tarde», agregó.

 

RECLAMAN EL CUERPO

Quien solicitó los restos de la fallecida fue su hija María Vanessa Estrada, residente de la calle Profesor Romero número 5 de la colonia Industrial.

«Al medio día hablé con mi mamá y le dije que iba a ir por unos muebles, que más tarde iba por mi hijo, siendo la última vez que hablé con ella», expresó.

Añadió que en horas de la tarde su hermana María le avisó de la tragedia.

Facebook
Twitter
WhatsApp

DESTACADAS