TAMPICO, Tamaulipas.- Desde hace 44 años, los hijos de doña María Eufrosina Ochoa acuden a verla al cementerio municipal de Tampico cada dos de noviembre.
Y desde hace 39 años tienen otro motivo, ya que también acuden a ver su padre Epifanio Ramírez que ahí descansa.
Los huapangos y los versos improvisados no pueden faltar al pie de la tumba por parte de la familia Ramírez Ochoa, una familia de huapangueros.
Son doce hijos y quienes en su mayoría acuden cada cumpleaños, cada aniversario y cada dos de noviembre a ver a sus padres.
Flores, música, plática y recuerdos abundan al pie de esta tumba, una de las miles de visitadas este día en el panteón municipal de Tampico.
Las autoridades esperaban cerca de 50 mil visitantes en el caso de los panteones Tampico.





