Una vez concluidas las acciones del Torneo Apertura 2015, jugadores y cuerpo técnico de Correcaminos tendrán sólo diez días de vacaciones, como castigo al pésimo torneo que están por firmar en ocho días y que podría ser peor de lo que nos suponemos.
Sí señores, Correcaminos podría pasar de tener un torneo desastroso a rayar en lo ridículo, pues como recordamos el reglamento indica que los equipos que concluyan en las tres últimas posiciones de la tabla general, no tendrán derecho a participar en la edición siguiente de la CopaMX y en este momento el equipo de la UAT pasaría a ese selecto grupo de pobretones equipos que no tienen los recursos deportivos suficientes para sostenerse en dos competencias al mismo tiempo.
Pobretones, lo digo, lo sostengo y lo repito, recordemos que “el beneficio” de no participar en la copa es un privilegio que la federación otorga a las escuadras peor clasificadas el torneo anterior para que se enfoquen en superar sus problemas deportivos o económicos que le significarían haber culminado entre los peores de la campaña anterior.
¿En verdad Correcaminos está para esto?. Dudo mucho que quienes sueltan su lana, llámese Gobierno del Estado y Universidad Autónoma de Tamaulipas crean que la inversión hecha este año a su equipo esté para dar tumbos tal y como está sucediendo.
No es porque uno, amigo aficionado, guste de ver correr sangre, pero a fuerza de ser sinceros deben señalarse y sancionarse a los culpables, llámense como se llamen y ocupen el cargo que ocupen, sea en cancha o fuera de ella.
Es por eso que digo, de entrada bien merecido que las vacaciones fuesen tan cortas, inclusive me comentan que tras el juego en Tepic se rompen filas, aunque no estaría mal que todavía se les aplicaran otros días más debiendo cumplir con horarios establecidos para labor social y sí, que se mantengan reducidas las vacaciones para todo aquel que se precie de haber recibido un sueldo de esta institución en el último semestre.
Y sí, contrario a lo que tenía conocimiento y lo que informaron cuando lo presentaron, Pepe Treviño tiene contrato hasta el próximo mes de mayo, pero imagínese usted lo que significaría quedar fuera de la CopaMX como ya le comentaba.
Lo recalco, Treviño no ha reunido lo suficiente para poder pensar en su continuidad al frente del equipo, sobre todo cuando ha demostrado además de falta de ética al referirse hace un par de semanas a su antecesor Ricardo Cadena cuando precisó que al perder, sus jugadores parecían cuando eran dirigidos por el susodicho, además de la pobre excusa de “yo no armé este equipo”.
Mientras son peras o son manzanas, este fracaso sólo significa una cosa: urge mejor planeación, mayor preparación y profesionalización en el interior de Correcaminos pues de lo contrario, lo único que se presagia es el principio del fin, puesto que la afición que le sobrevive a este equipo ya no tendría el más mínimo interés por apoyar o simplemente seguir los partidos de un equipo que se le invierte mucho y parece que es a lo loco, pues no sale de lo mismo, promesas que no se cumplen y camina de reversa en lo deportivo.
Mucha valentía se necesita para cumplir con la labor social que siguieron llevando a efecto esta semana pues con qué cara osarían pararse frente a la comunidad victorense tras el mal paso del equipo. Eso es de aplaudir y qué bueno que se rescató, lo lamentable es que no haya equilibrio entre lo deportivo y el contacto con la afición.
Y agárrese porque a la mayoría de los jugadores el contrato les ampara seis meses más con el equipo de Victoria por lo que se tendrá que ser muy cuidadoso con lo que se contrata para darle rumbo a esta nave que naufraga y que vivirá un Clausura 2016 clave en su historia, pues concluye una administración que ha invertido cientos de millones de pesos para tenerlo en Primera División y el día de hoy es el más lejano de ese objetivo.
@luisdariovera