SAN FERNANDO, Tamaulipas.-Un ebrio consuetudinario murió tras ser devorado por unos cerdos que cuidaba luego de quedarse dormido en el chiquero.
El escalofriante caso ocurrió en la ciudad de San Fernando, en la calle Francisco I. Madero y libramiento a Petróleos Mexicanos, de la colonia Bella Vista Norte, según información de la policía ministerial.
El cuerpo se encontraba devorado de la cabeza, pues en los mordiscos que le dieron los animales, le arrancaron parte de ella y del cuero cabelludo.
El ahora occiso sólo fue identificado como “Porfirio Cadena”, quien contaba con 85 años y era originario del estado de Veracruz.
A la escena arribaron oficiales, mismos que entrevistaron a un individuo que se identificó como Luis Felipe Ríos de la Rosa, de 75 años y su pareja sentimental, Ignacio Melo Loredo, de 34 años, responsables de haber encontrado el cadáver.
Ambos dijeron ser adictos a las bebidas embriagantes junto con la víctima, quien había ido al corral a darle de comer a los cerdos que ellos cuidan.
Aseguraron que no supieron más de él pero no le tomaron importancia hasta que al día siguiente, ya por la mañana, lo encontraron tirado en el chiquero mientras los marranos lo masticaban ante la falta de alimento.
Se cree que por lo ebrio que se encontraba el alcohol le ganó, por lo que pudo resultarle fácil dormirse sin imaginar que sus propios animales se lo comerían.
Los primeros en llegar a la zona fueron los elementos de la Fuerza Tamaulipas, -Policía Estatal-, quienes se dieron a la tarea de sacar el cuerpo ya que los testigos optaron por no mover a la víctima.
Las autoridades detallaron que al hombre ya le había devorado parte de la cabeza, tórax y mano izquierda.
Confirmado el caso, al sitio también acudió el Agente del Ministerio Público Investigador, Marisol Borja, para tomar conocimiento de los hechos.
La fiscal ordenó la autopsia de ley.
