“La leyenda dice que Apolo, en un momento de solaz, volvió la mirada hacia aquellos pequeños seres terrenales que perseguían afanosamente sus destinos”. (Doris Lessing. Premio Nobel de literatura 2007. El Viento se llevará nuestras palabras).
1.-Manlio Fabio Beltrones viene a poner orden entre los grupos que se disputan la gubernatura. A decirles que se acabó el juego y que de ahora en adelante tendrán que atenerse a las consecuencias si es que desean seguir participando en el “reality show” rumbo al premio mayor. Sea a precisar que la disciplina será fundamental para sacar a favor del tricolor el proceso que se avecina “con el abanderado que la suprema autoridad designe”. Ya se sabe que en este sentido el dirigente tiene fama de “duro, claro y convincente”. Además, dicen, que es apostador y como tal las estrategias no siempre le
resultan ni siquiera con tercia de ases en sus manos, pero de eso no estamos hablando.
De manera que del sábado próximo en adelante no habrá opciones salvo el derecho a la negociación siempre y cuando se acepten las condiciones que por supuesto no sabemos cuáles sean pero de que han de ser diferentes a otros tiempos eso-que-ni-que. Ahora más que nunca se impondrá la lealtad que por eliminación natural evitará berrinches y caprichos con los que suelen extorsionar “los ofendidos” que en este caso serán más de media docena y los que se acumulen de aquí a la segunda quincena del mes en curso. Usted preguntará, ¿en verdad habrá más de los ya conocidos?. Y mire que a cómo se ve y siente la situación es de creer que el PRI no le entrará a las sorpresas, al contrario.
El asunto es que en unas horas el juego libre terminará e iniciará la parte “seria” de la sucesión que incluye “encerronas” en salas privadas con prohibición telefónica y cualquier aparato que comprometa hacia el exterior, diálogo “en cortito” con frases en clave, secretos guardados hasta antes del penúltimo brindis y desde luego bromas y anécdotas que servirán de entremés para soportar las palabras mayores de “el destape”.
2.- A partir del sábado olvide las encuestas que sólo causan pena, harta vergüenza y conducen al ridículo. Olvídelo digo, porque ya nadie cree en estadísticas maquilladas que resultan buen negocio para otros que aprovechan el estado anímico de los contendientes ofreciendo remedios mágicos y en veces hasta “caseros”. Más o menos como las cremas y yerbas milagrosas que encuentran a sus mejores víctimas entre la ignorancia y la desesperación.
Decir que dentro de unas cuarenta y ocho horas iniciará la cuenta regresiva para quienes aspiran a la gubernatura es una exageración. No porque supongan cerca la inmortalidad, sino porque todos cuentan con la experiencia de haber transcurrido por los inescrutables caminos del surrealismo político. Están “curtidos” en el manejo del arte palaciego que de alguna manera los inmuniza contra los efectos del tiempo perdido y la esperanza volátil. Son estrategas de la dialéctica: pueden ser o no ser, pueden estar o no estar, todo depende del estado de ánimo de las instituciones. Para decirlo pronto: son profesionales de “la grilla” y en algunos casos sembradores de sueños ajenos. Y aunque usted no lo crea, también son humanos, privilegiados pero humanos al fin, con defectos y debilidades que en ellos parecen virtudes. Hasta que la nómina los ignore.
Quedamos en que para el PRI la fiesta inicia este sábado aunque bajo cierto riesgo, sobre todo si los panistas deciden lanzar al ruedo a Francisco García Cabeza de Vaca, el indomable norteño que ha sobrevivido al fuego cruzado por más de diez años. Y sigue tan campante.
ENTRE NUBES DE ALGODÓN
El presidente Peña Nieto por fin estrenará el avión adquirido en correspondencia a la importancia del cargo que ocupa. Ya sabéis, se trata de un Boing 787-9 Dream Liner con valor aproximado a los 5 mil millones de pesos que llevará el nombre de “José María Morelos y Pavón”. El Siervo de la Nación diría, “y yo por qué?”. El hecho sucederá este mismo mes, justo cuando EPN cumple la mitad de su mandato y cuando las críticas hacia el desempeño gubernamental se vuelven más insistentes, incluso de personajes que tradicionalmente han sido oficialistas como Jorge G. Castañeda, mismas que Héctor Aguilar Camín las reprodujo este miércoles en Milenio, entendiendo que las hace suyas.
Lo menos que señala el dúo Castañeda-Aguilar Camín es que “en público, el gobierno de Peña Nieto no discute, expone, en ocasiones contesta sin oír, pero con mínimas excepciones, re-huye el
enfrentamiento sustantivo con sus opositores, crítico o simples interlocutores no incondicionales. Hay ausencia de debate”.
Mientras tanto la opinión del común mexica coincidirá en que no son tiempos para disfrutar un aparato que de tan costoso seguro sacude las maltrechas finanzas nacionales y menos cuando a mitad del sexenio las mayorías aún no tienen nada qué celebrar. Y ni modo que sea invento.
SUCEDE QUE
El calificativo público hacia las recientes comparecencias ante el Legislativo de Antonio Martínez Torres, Herminio Garza Palacios, Rolando Guevara González y Diódoro Guerra fue de excelente. No podía ser menos por la coincidencia de que son políticos profesionales. Nada más por eso. Ni como negar que el diputado Ramiro Ramos Salinas entrega buenas cuentas.
Y hasta la próxima.
