En cualquier parte del mundo, si hubiera ocurrido un problema similar con el agua, ya estarían en prisión o mínimo cesados los responsables de dejar sin este servicio vital a más de 100 mil habitantes.
La falta de agua que hemos visto y padecido estos días, por causa de un incendio y explosión del transformador central que alimenta de energía la planta de bombeo que trae agua a la ciudad, es un problema que no debe repetirse, y que la autoridad (Ayuntamiento y Comapa) obligadamente debe darle una explicación exacta y convincente a los usuarios que aún padecen en desbasto del agua y de aquellos que han visto el drama de las familias con sed.
Que se queden sin agua a más de 100 mil habitantes, por culpa de una negligencia o ausencia de prevención (falta de mantenimiento dicen los técnicos), es criminal, y el término se queda corto, porque se incluye un problema de salud pública, porque primero se queda la población sin agua y después se expone a ésta a un problema sanitario. No hay que perder de vista que el agua que se reparte en pipas y que incluso se consume, no es potable, aun cuando la cloren. El problema como el cólera asecha ante situaciones de este tipo.
La ONU y la Organización Mundial de Salud, en sus códigos humanitarios afirma que aquella autoridad que no garantice el abasto de agua a la población por mas mínima que ésta sea, falta al derecho más elemental que es preservar la vida humana.
El asunto, en este caso, es evidente y obvio que alguien falló y debe haber consecuencias legales para los responsables por no dar mantenimiento a los equipos y de no prever una situación de emergencia como la que se vivió.
José Bringas, siendo gerente de la Comapa en 2005, lo dijo con todas sus letras:
«La planta del agua requiere de mantenimiento. Aguanta hasta el 2012, y si no hay un mantenimiento a tiempo, esto va a tronar». Y tronó, y las consecuencias ahora se están padeciendo.
Este asunto, que para algunos es más doméstico y que se arregla reemplazando un generador de manera emergente, tiene consecuencias políticas y de salud que deben valorarse en su justa dimensión. Las condenas en las redes sociales hacia las autoridades locales y de la Comapa no deben ser un grito en el vacío.
Lo más importante ahora es encaminar acciones para que reparen el daño y evitar que esto se repita.
Dejar sin agua a un sector tan amplio de familias es reprobable desde cualquier ángulo que se vea. En esto no hay excusas. Pues se ha puesto en riesgo la salud de miles de personas. Lo que ha pasado en Victoria, es peor que la inseguridad que se padece desde hace 10 años. Las reacciones de la autoridad ante este problema ha sido el adecuado pero, ha faltado contundencia en sus respuestas. En estos días donde la sensibilidad está a flor de piel, cala más y no se olvida.
Eliseo García, gerente de la Comapa, y todo su equipo de técnicos, están obligados a salir y dar una explicación de lo que pasó, y sobre todo aplicar sanciones sobre los responsables, sean quien sean, pues se puso en riesgo la vida de toda una población. El agua es vida y con la vída de más de 100 mil habitantes, no se juega.
Talachazos
LA OTRA CARTA DE VIDEGARAY.-A unos días de que se conozca el candidato del PRI a la gubernatura, hay movimientos y no se descartan sorpresas. Trascendió que el todopoderoso secretario de Hacienda, Luis Videgaray, se ha movido y ha sostenido encuentros con algunos aspirantes priistas que no son particularmente de su establo y les ha ofrecido su apoyo. Dicen que quiere llegar a la mesa con más opciones de las que todo mundo conoce. Dicen que será después del 10 de enero cuando los priistas de Tamaulipas estarían conociendo el nombre de su candidato. Falta poquito.
PEPE SALE A LA CALLE.-Un buen recibimiento tuvo el alcalde reynosense Pepe Elías, en las calles de las colonias en donde entregó decenas de calles pavimentadas.
Sin costo alguno para los vecinos de las colonias, el edil entregó las obras, lo que le acarreó aplausos y agradecimientos de las familias. Durante el año que hoy concluye, el ayuntamiento tuvo inversión sin precedentes en pavimentación. Fueron más de 300 millones de pesos que beneficiaron a más de 40 mil familias de las colonias más populosas, informó la Dirección de Obras Públicas.




