CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Hijo de un futbolista gloria en la historia del balompié victorense, Armando “Pulpo” Pulido, nació prácticamente con el destino marcado.
Fue el 8 de marzo de 1991 cuando Alan Pulido Izaguirre nació en Ciudad Victoria para convertirse 25 años después en un símbolo del fútbol cuerudo, pero además sinónimo de la lucha por combatir la injusticia en la industria del fútbol profesional en nuestro país.
Muy pequeño, después de militar en diversos equipos en Copa UAT donde se distinguió como un elemento con habilidades, sobre todo con el equipo Estrellitas, Alan siguió los pasos de su hermano mayor, Armando, y emigró a Monterrey para tocar la puerta con los Tigres de la UANL donde forjó no nada más una carrera, sino también el carácter que lo distinguiría del resto.
En 2007 el cuadro felino lo debutó como jugador en la Tercera División donde poco a poco se dio a conocer con goles, su proceso lo llevó a la segunda categoría en 2008 para después, en 2009 y gracias al formato de la entonces llamada Primera División ‘A’, tener la oportunidad de jugar con la filial de Tigres en el mencionado circuito.
Alan contó con carnet que le permitió andar entre la Segunda División, Primera ‘A’ y Fuerzas Básicas Sub 20m siendo justamente esta última categoría en la que tuvo mayor constancia para contabilizar un total de diez goles en 23 partidos, lo que le valió ser visto por Daniel ‘Travieso’ Guzmán quien le vio las condiciones para integrarlo al primer equipo.
El Torneo Bicentenario 2010, Alan sumó actividad en cuatro partidos, dos de ellos como titular, donde acumuló 144 minutos como jugador de Primera División, actuación que alternaba con los cuadros filiales.
Para el torneo siguiente, Apertura del mismo 2010, Alan logró aparecer desde la jornada 1, para finalizar dicho certamen con actuación en diez encuentros, aunque ninguno de ellos como titular y aún sin poder marcar gol.
Pero fue en el Clausura 2011 donde su efectividad se empezó a notar; el miércoles 13 de abril de ese año es un día inolvidable para Alan, pues ‘El Volcán’ estalló con el primer gol salido de sus botines en el máximo circuito; la víctima: los Tuzos del Pachuca.
Tigres se ensañó con los hidalguenses 4-2 y el de Victoria hizo el último de la cuenta cuando quedaba un minuto en el cronómetro; aunque eso iniciaría también una historia alterna con su entrenador: Ricardo ‘Tuca’ Ferretti.
Alan terminó ese torneo con tres goles en 82 minutos de acción.
En el Apertura 2011, Alan junto con Tigres tocó el cielo y eso que en 222 minutos de juego en el torneo regular que significaron diez partidos con actividad, no pudo marcar gol, hizo uno que jamás se olvidará.
Fue en la final de ese torneo frente a Santos, cuando Alan marcó su único gol del semestre; era el minuto 86, ‘El Volcán’ vibraba de emoción pues 30 años después su equipo volvería a ser campeón y el victorense clavó la puntilla a los laguneros al minuto 86 cuando hizo el 3-1 definitivo y Tigres alzaba el trofeo de monarca.
Del 2011 al 2014, entre juegos de LigaMX y CopaMX, Alan contabilizó 24 anotaciones, pero para Ferretti nunca sería suficiente, pues con su frase “Aún le falta madurar” desgastó una relación que se tornó sombría, al menos en público.
Para el 2013 Alan volvió a coronarse junto a Tigres con sus goles, ahora en la CopaMX, para 2014 su presencia en la Selección Nacional era obligada pues era el delantero mexicano más productivo a la ofensiva.
El Clausura 2014 con 5 goles en 17 partidos, Alan jugó su último torneo con Tigres.
Fue al Mundial de Brasil convocado por Miguel Herrera y aunque no vio minutos de juego, fue parte de esa selección; a su regreso empezó un viacrucis.
Alan reclamó a Tigres la renovación de su contrato o la liberación para poder emigrar a otro equipo, de preferencia en el extranjero.
Tigres sostuvo que el jugador aún tenía contrato y que tenía que respetarlo bajo las condiciones que el mismo club estipulaba.
Alan, sancionado por el cuadro auriazul dejó de ver actividad e inclusive fue sancionado por Ferretti. Apoyado por los medios regiomontanos, Tigres trató de empañar la imagen de Pulido filtrando videos y generando rumores acerca de su comportamiento fuera de las canchas.
Convencido de tener la razón de su lado, emigró a Europa donde se entrenó y en 2015, con una controversia de por medio ante la FIFA y el Tribunal de Arbitraje Deportivo, Alan jugó para el Levadiakos griego.
Arropado siempre por su familia, mantuvo el ritmo de juego al grado que el equipo más grande del fútbol helénico puso la mirada sobre él; para el segundo semestre del 2015, Alan se enfundó en la camiseta del Olympiacos, que por segunda vez en su historia tenía un mexicano en sus filas, el primero había sido Nery Castillo.
Entre partidos donde salía a banca, parecía que el debut del victorense no llegaría; fue en actividad de Copa donde vio sus primeros minutos y respondió con gol.
Convencido que merecía más actividad, Alan no dejó de trabajar en las prácticas y así le llegó su debut en la liga donde también marcó gol.
Hace una semana, con un gol suyo, Olympiacos obtuvo el triunfo que le asegura el título del fútbol griego, convirtiendo a Pulido Izaguirre en el primer victorense campeón en el fútbol europeo.
Hoy, con 25 años de edad, Pulido con una situación por resolver con Tigres, que pasa a segundo término pues en el plano deportivo va en pleno ascenso. El técnico de la Selección Mexicana, Juan Carlos Osorio y el presidente del Comité de Selecciones Nacionales, Santiago Baños ya hicieron público el interés porque el victorense integre alguna de las selecciones que este año tienen compromiso en la Copa América Centenario y en Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
La vida, como el balón de fútbol da muchas vueltas, Alan Pulido nunca desistió en su lucha por jugar y hoy su talento lo tiene ubicado nuevamente en lo más alto.