Se dice y se comenta, que un curioso e interesante diálogo se desarrolló ayer por la mañana cuando los jugadores de Correcaminos se disponían a viajar hasta Mexicali para iniciar los playoffs de la Liga Nacional de Baloncesto “Profesional”.
Ni más ni menos raza, y eso de profesional lo pongo entre comillas porque mucho pone a pensar una liga que se hace llamar profesional cuando hay equipos con tantas deudas que prefirieron quedarse fuera de competencia pese a que tenían la posibilidad de ser campeones, al menos con boleto en mano a playoffs y otros que terminaron con una nómina exactamente de cinco jugadores para poder salir del compromiso.
Le mentiría si le digo a qué se referían, pero el diálogo que alcanzó a escuchar mi informante disfrazado de parquímetro chimuelo en las cercanías de la casa club, nos da hartos argumentos para la “rumorología” (dijeran los boletineros de gobierno) y el sospechosismo.
Con las maletas listas para partir a Mexicali, los jugadores del equipo de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, pensativos volteaban a ver el autobús que les mandaron para viajar a su destino, uno de esos camiones de turismo que abundan por la capital. Quién sabe si ese sería el que los llevaba hasta Baja California, no creo, se necesitan muchas horas de carretera para poder llegar hasta el otro extremo del país, más en ese transporte.
Algo no le parecía a los susodichos que en la penúltima serie del calendario regular lograron el pase a las finales, algo simplemente no les cuadraba pues la escena era de inconformidad.
“Vamos a ir si o no”, preguntó uno de los jugadores mientras los demás se veían entre ellos, “Si vamos a ir pues para subirnos al camión y vámonos ya”, concluyó el diálogo y continuó la escena.
Y bueno, en un escenario así ya si Correcaminos no iba a parecer institución seria, entre tanto deudor y desorganizado, un equipo como el de Victoria tenía que destacar de alguna forma, ni en los peores tiempos de Modesto Robledo se anduvieron con esas cosas.
Lo que si es cierto es que nos llevará tiempo saber qué fue lo que pasó, qué generaba esa duda entre viajar o no, tal vez el transporte, tal vez el recorrido o alguna circunstancia administrativa… ¿tal vez el informe no llegó bien?, no, eso si no creo, pues cuando el río suena, es porque agua lleva.
EL TIRA-TIRA
TIRO.- Hablando de cosas raras, también muy sospechoso resultó el graffiti en lo único que sobrevive del viejo Praxedis Balboa, la barda que da al 16 hasta Berriozábal, donde de forma por demás malandresca supuestamente los ofendidos exigen respuesta acerca de los arcos robados en el Polideportivo de Santos Lozano… bueno, no es que él sea el dueño, es donde el matamorense finge, perdón, funge, -me está fallando el teclado- como administrador del mismo.
Por lo que se ve, los arqueros tamaulipecos, que por lo que tengo entendido y veo, son buenos muchachos y muchachas, sanos todos, deportistas, atletas, estudiantes, de buena familia, agarraron el bote de pintura en spray y desplegaron su arenga en el vetusto inmueble que se resistió a la lluvia y quién sabe de qué esté sostenido, pero esa es otra historia.
Dudo mucho que los chavos pasaran de agredidos a agresores, pues aunque su reclamo es justo, al menos para mí, no fueron las formas, no se compara pero es combatir un delito con otro, como lo es este tipo de manifestaciones.
Ya Enrique de la Garza dijo que lana en el Instituto no hay para los arcos, que están esperando que el Gobernador diga si podrá apoyar o no y por lo visto no hay muchas esperanzas. Lo mejor será que la gente de los dineros en el gobierno estatal diga si va haber o no, para cuándo y de cuánto estaríamos hablando, porque flaco favor le están haciendo a Don Enrique con ponerle más suspenso a esta película que ya casi es de terror.
REMATE.- Los que están pasando las de Caín son los campeones estatales Sub 17 que tienen que viajar el viernes a Ciudad Juárez para el Campeonato Nacional “Benito Juárez”, pues cuando la Asociación Estatal de Fútbol les garantizó el apoyo para hacer su viaje, resulta que siempre no y en el Instituto del Deporte de seis camionetas que tenían, ya nada más les quedan dos, dos, dos, dos, como la canción.
Por ende, no les pueden prestar una ya que se atraviesa el estatal selectivo de atletismo.
Mario Coronado anda tocando puertas para que su equipo, el Pachuca SUTSPET, por cierto subcampeón nacional en 2014, pueda ir a representar a Tamaulipas hasta Juárez… no me gusta decirlo pero desde antes que empezara ese torneo se veía difícil el apoyo para ir hasta allá y yo: se los dijeeeee.
GOL.- Ya fue mucho por hoy, me despido pidiéndole un favor: autocuídese.
@luisdariovera