CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Ante la inseguridad que prevalece en varios municipios de Tamaulipas, el Instituto Nacional Electoral -INE- autorizó la entrega de 973 seguros de vida a su personal de campo, que los cubre por una cifra cercana a 500 mil pesos en caso de muerte.
Si bien los eventos de violencia no han alterado la organización del proceso electoral, capacitadores y supervisores han vivido algunas situaciones de riesgo en Matamoros, Reynosa y Victoria.
Patricia Navarro Mancada, vocal de capacitación electoral del INE, señaló que el instituto busca cuidar por los medios posibles de estas amenazas a su personal.
En febrero de este año, en mitad de una balacera en Matamoros, personal de capacitación fue regresado a las oficinas.
“No han sido eventos contra el personal, que quede claro, son situaciones que de pronto se registran, donde están trabajando los capacitados”, aseguró la funcionaria.
La contratación de 841 capacitadores electorales y 132 supervisores incluyó la entrega de un seguro de vida por 448 mil pesos en caso de muerte por accidente. Hay un seguro adicional para el mismo personal de campo de 224 mil pesos por muerte natural.
Las condiciones de los seguros de vida y gastos médicos mayores pueden variar de acuerdo con las políticas de la aseguradora.
«Los riesgos son varios, hay personal que sufre caídas o fracturas y cuando hubo incidentes de riesgo en algunas zonas, le hemos pedido a los capacitadores retirarse a otra sección a trabajar», dijo Navarro Mancada.
“La primera indicación que tiene el personal de campo es retirarse de inmediato de la zona donde se estuviera registrando una situación de riesgo.
Aun con las coberturas y prevenciones, se verifica que sus condiciones de trabajo sean seguras y no ha habido ninguna amenaza directa a los capacitadores, aseguró la vocal de capacitación.
Los casos más extremos han sido cuando algún desconocido los interroga en la calle para preguntarles quiénes son, pero todos están identificados y pueden seguir con su labor.
Los funcionarios del INE dijo que cada trabajador de campo porta su identificación y utiliza artículos oficiales para notificar a los ciudadanos como funcionarios de casilla.
