CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Vecinos de las colonias Linda Vista, Luisa Montemayor y Riberas del Río en la zona este de la ciudad pidieron a las autoridades la construcción de puentes peatonales para cruzar el río San Marcos, debido a que en ese lugar transitan más de 600 personas diariamente.
Aún cuando las colonias de esa zona de la ciudad tienen el acceso del puente de la Moderna, inaugurado recientemente, aún falta al menos construir tres cruces del río para que la gente todos los días llegue al otro lado para comprar mandado, realizar sus trámites o llevar a sus hijos a la escuela.
Así sucede con la señora Ramona Martínez, quien desde hace más de diez años que es invidente, y que dos o tres veces por semana tiene que cruzar el río San Marcos caminando entre las piedras acompañada de su sobrina, lo cual le representa una tortura a cada paso.
«Esta difícil pasar por aquí, porque como yo no veo, pues batallo con las piedras y las hondonadas que existen en el río», expresó la residente de la colonia Linda Vista.
Otro de los problemas que enfrentan alrededor de tres mil personas que viven en esta zona de la ciudad es cruzar en la noche, ya que estos caminos se vuelven más peligrosos en la obscuridad y además corren el riesgo de sufrir asaltos.
«Nosotros sólo cruzamos por aquí en el día, porque nos han dicho que en la noche se pone medio peligroso y no se ve nada al otro lado», expresó Guadalupe Valdez, madre de familia con un niño a quien conduce a la escuela primaria del otro lado del río en la colonia Liberal.
Pese a contar con el puente de la Moderna, que fue inaugurado el 11 de junio del año pasado, para Guadalupe cruzar por esa vía representa caminar un kilómetro más en su ruta bajo los rayos del sol en esta temporada, por lo que decide mejor aventurarse a cruzar por el lecho del río San Marcos.
«Yo voy y cruzo por el puente ese, tengo que caminar 400 metros y luego regresar hasta esa avenida, por ello me aviento por las escaleras», expresa la madre de familia.
Más al este a 300 metros está el cruce de la calle Ejército Mexicano, el cual en forma regular es usado por vecinos para ir a comprar mandado o para tomar una ruta de camiones para sus centros de trabajo.
Así ocurre con Mario, un estudiante universitario, quien realiza sus prácticas profesionales en una dependencia de gobierno y que todos los días camina por el lecho del río tres veces, por lo que cuando baja el agua del río es imposible cruzar por esta zona.
«Luego de los días que llueve, se queda escurriendo el agua y pues en esas fechas tengo que dar la vuelta hasta el puente, y está bien lejos para mí», mencionó Mario Hernández.




