Ayer, en la fotografía del CEN del PAN, omití el mensaje central: Ricardo Anaya está posando con siete gobernadores electos y cinco en funciones. La lectura es obvia y contundente: el llamado joven maravilla, muestra el músculo político de su partido, el PAN, rumbo a las elecciones presidenciales del 2018.
Anaya se promueve abiertamente, ya como el hombre que en su momento, seguramente reclamará la candidatura presidencial, o al menos estará en la gran final. Otro rasgo de semejante ostentosidad de poder, es que, en dicha imagen, se puede palpar el orgullo de ser panista, y de llevar la camiseta.
En contraste, les platico, una segunda imagen:
El mismo martes, 16 de agosto, por la noche, vi la segunda parte de una entrevista exclusiva que concede el Presidente Peña Nieto a Joaquín López Dóriga. El encuentro entre el Jefe de Estado y el periodista de origen español, pero nacionalizado en nuestro país, pretende cumplir con dos objetivos explícitos: por un lado, “vacunar” a Peña, en torno a los temas más escabrosos, como su baja popularidad, el fracaso en el combate al narco, el caso Ayotzinapa, pero sobre todo, la presunta debilidad del gobierno ante los embates de la CNTE.
El segundo objetivo, de carácter accesorio, se inserta en una especie de despedida y de espaldarazo, que el Presidente le brindaría a Dóriga, ante su inminente
relevo del noticiero, después de 16 años de estar al frente.
El formato, ya no es estático ni acartonado, sino que se realiza durante una aparente caminata casual, por los andadores de la residencia oficial de Los Pinos.
Justo ahí, en la orilla de los jardines del poder, Joaquín le pregunta a Peña, sobre su anhelo de que el PRI alcance un segundo periodo sexenal. “No me diga que
no le gustaría que el PRI ganara”, le pregunta el periodista, palabras más, palabras menos, y la respuesta presidencial se da sin el menor asomo de emoción. Le contesta que a él, lo que le interesa es que se fortalezca la democracia. ¿Aún y cuándo gane el Peje?, nos preguntaríamos.
A contracorriente de un Felipe Calderón que siempre llevó puesta la camiseta del PAN, y que incluso en el 2010, fue duramente criticado por un discurso a favor de Acción Nacional, hoy Peña Nieto se va al otro extremo, y pareciera que, no le interesa en lo más mínimo la suerte del PRI.
JLD, le vuelve a preguntar sobre lo mismo, y la postura y la reacción de EPN, es invariable. Se ve que Enrique Peña Nieto, no va a preocuparse porque gane el PRI.
Ante, su marcado desdén para su partido, con un poquito de suspicacia, uno podría advertir que su respaldo podría ser, para él o la candidata del PAN.
Afloran las contradicciones, en las respuestas de Peña. Cuando se le cuestiona sobre su bajísima popularidad, el Presidente contesta que a él, la popularidad no le interesa, y que lo importante para él, son las reformas. Sin embargo, Peña omite reconocer que el suyo ha sido un gobierno no solo impopular, sino ineficaz, y divorciado de los reclamos más sentidos de la población, en temas como la inseguridad y el combate a la pobreza.
Ayer, Carlos Loret de Mola, desliza la elevada posibilidad de que, el sexenio de Peña Nieto concluya con un récord de muertos, superior al de Felipe Calderón, que en su momento constituyó todo un escándalo. Si con Calderón fueron 123 mil, con Peña, opina el columnista, podría llegarse a las 127 mil víctimas.
Por todo lo que ya les he comentado, no es descabellada la hipótesis, planteada por el periodista Alvaro Delgado, en su libro, El Amasiato, donde revela que, en su momento, el gobernador Peña Nieto, ayudó a Calderón, en el 2012, FCH le devolvió la copa, y en el 2018, la familia Calderón Zavala, podría volver al poder, de la mano de Margarita. De ser así… ¿quién será el «Chepino» Vázquez Mota, del PRI en el 2018?
AUMENTA LA DISIDENCIA EN LA CTM
Considerado como un dirigente comparsa, al servicio del sector empresarial, el actual dirigente de la CTM, Edmundo García Román, siente pasos en la azotea.
Agrupaciones obreras de Altamira, afiliadas a la CTM, están demandado la salida de Mundo, un personaje que salió, dicen, de las filas del sindicato de los trabajadores de las salas cinematográficas, identificados como los “cácaros”.
García Román podría ser parte del desmantelamiento de las corporaciones políticas, que desde hace mucho, dejaron de ser útiles al PRI.
POSDATA: El Coronel Anastacio Santos Alvarez, es desde ayer, el nuevo Comandante del 77 Batallón en esta capital. El citado jefe castrense, es licenciado en administración militar, por la universidad del ejército y fuerza aérea.
Ha desempeñado en tareas de mando, en los estados de Michoacán, San Luis, Oaxaca, Tabasco y Guerrero.
