O lo que es lo mismo, “ven la procesión y no se hincan”.
Los juegos olímpicos de Río 2016 dejan un mal sabor de boca en los mexicanos, ante la certeza de los malos manejos en la Comisión Nacional del Deporte, que no da una, la visible mano de la corrupción en una área que debería ser motivo de orgullo y superación, por el contrario, se ve ensombrecida por cacicazgos corrompidos que impiden la aplicación del dinero público en la formación de deportistas de alto nivel, aunado a la reducción del presupuesto a esas actividades en la presente administración federal.
Luego la imposición de hombres desconocedores del tema, en el caso de Alfredo Castillo, quien no logró el éxito como comisionado de seguridad para Michoacán y que por un movimiento de magia de Enrique Peña Nieto se convirtió en experto administrador del deporte mexicano.
Este hombre no pudo con su responsabilidad en suelo michoacano, el alto índice de criminalidad en esa entidad lo prueba y ahora hace un papel absolutamente deprimente en la justa olímpica en Brasil, con sus componendas y su protección a allegados y allegadas que se gastan el presupuesto en lugar de invertirse en los
deportistas.
Agregándosele el nuevo escándalo de la esposa de Peña Nieto y su justificación, a todas luces injustificada de pedirle a “un amigo y vecino”, dueño de una importante empresa, que le pagara los miles de dólares por concepto de impuesto predial de su departamento en Miami, trámite que pudo haber sido hecho desde
México vía electrónica, según lo afirma una nota del periódico Reforma.
Esos puntos son mínimos comparados con el empecinamiento de continuar una lucha fraticida en las calles de México con el pretexto de combatir a los grupos de delincuencia organizada que cada día deja miles de damnificados, víctimas inocentes de los enfrentamientos y la ola delictiva.
Viéndolo de esa manera, los resultados adversos en las contiendas electorales no son producto de la casualidad, es un proceso que los propios gobiernos priistas han ido tejiendo a través de años de irresponsabilidades, complicidades, omisión, corrupción e impunidad.
Y para acabarla de amolar, Peña Nieto sale diciendo que también hay buenas noticias y sin decirlo, echa la culpa a los medios de comunicación de informar sólo las malas. Una vez más, responsabilizan al mensajero, porque el gobierno de ninguna manera tiene la culpa de que las cosas vayan tan mal en el país.
Todos esos actos fortalecen al PAN, que aliado con el PRD, puede llegar de nuevo a la presidencia de México.
EN DUDA LAS PLURIS
El tribunal electoral dictaminó que el Instituto electoral de Tamaulipas se extralimitó en sus funciones, lo que generó inconsistencias en el cómputo final de la elección para definir cómo quedarán repartidas las diputaciones plurinominales, según indica el periódico Expreso. Por ello, uno de los principios del organismo electoral, la “certeza” se perdió por parte del IETAM, afirma el tribunal porque emitió dos dictámenes para el mismo cómputo.
Lo cual lleva a declarar ilegal la rectificación porque el IETAM no está facultado para modificar sus propias decisiones de acuerdo a la Ley electoral, sostiene otra vez el tribunal. Entonces, y en palabras llanas, aún no se sabe cómo quedarán repartidas las pluris.
Por cierto en el IETAM están presentando renuncias sus funcionarios, ya son tres, ¿a dónde van? Es la duda, posiblemente a integrarse a la administración panista, todo puede suceder.
Por otro lado, en el congreso anuncian que sesionarán de forma extraordinaria el jueves 25 para desahogar resoluciones referentes a las cuentas públicas de los ayuntamientos.
Correo electrónico:
derrotero@hotmail.com
Twitter: @derrotero_mx
