5 diciembre, 2025

5 diciembre, 2025

¿Qué va a pasar?

Sol General

Recapitulemos.
El viernes hablábamos en este mismo espacio de los marcados errores de la administración actual, donde Egidio Torre Cantú dispuso de -parafraseando a un expresidente del club- ‘cartera abierta’ para Correcaminos, lo cual sobrevino en evidente despilfarro de recursos públicos, nula planeación y por lo tanto, resultados exitosos inexistentes.

El tema lo abordábamos en referencia a la sinceridad con la que Torre Cantú se abrió de capa ante algunos periodistas que le plantearon temas diversos en una reunión informal celebrada la semana pasada en Casa de Gobierno.

Reitero y afirmo: la intención del gobernador fue buena, error, insisto, estuvo en dejar la responsabilidad en la parentela que sin experiencia alguna le entró al toro y por consecuencia lo que ya todos conocemos y la afición padece.

Las opiniones en su mayoría coincidieron, pero el sentir del aficionado pasó de la reflexión al coraje y después a la zozobra.

Hoy el seguidor de Correcaminos se pregunta: ¿qué va a pasar con mi equipo?.

La dependencia total que el equipo naranja tuvo en los años recientes del Gobierno del Estado, genera dudas y controversia día a día en el circulo cercano del club y por supuesto en quienes son sus seguidores.

El gobernador electo, Francisco García Cabeza de Vaca, en charla con un servidor me expuso en su momento que grandes sumas del dinero de los tamaulipecos no puede irse en un espectáculo de esta especie.

Añado a título personal, y menos cuando es administrado de tan mala manera. Aunque también hay que decirlo, no hay equipo profesional en todo México que no reciba dinero del gobierno, aquí la bronca es que recayó en gente incapaz.

El temor de los aficionados radica en que el equipo sea pieza de revanchismo político y se desprenda de su casa, pues el mismo desconocimiento genera rumores de todo tipo, como la desaparición de la franquicia, la mudanza a Reynosa, la concesión total a la Universidad Autónoma de Tamaulipas y peor aún: que siga como está, con la directiva que tiene y sin interés de nadie por marcar un orden.

Hoy ha quedado muy claro que son muchos los factores a considerar en un club profesional, pues ha sido pública la injerencia del gobernador electo a la hora de hablar del Tampico-Madero. ¿En qué consistió?, atraer a gente de experiencia dentro de futbol, generar la confianza en el entorno para su inversión y que el producto quede en manos de expertos en la materia.

Orlegi-San Román fue la fusión para hacer de la Jaiba Brava lo que al menos en el papel lucía impresionante; hoy son últimos de la tabla general, descontento generalizado en el puerto y con grandes riesgos de perder la categoría el torneo próximo para volver a Segunda División.

Sin desviarnos del tema, en Tampico el declive llega cuando personas sin arraigo, ni identidad se involucra en un proyecto y no tiene al alcance el pulso de la afición, el sentir del pueblo.

Como siempre hay excepciones a la regla, aquí no aplica la intención es lo que cuenta, por más buena que esta sea.

En conclusión, ¿qué pasará con Correcaminos?, indiscutiblemente será un tema que en su momento se pondrá en la mesa del gobernador, seguramente para empezar desde cero en enero próximo y suponiendo que la actual administración dejará el colchón de recursos para que la actual directiva cumpla cabalmente con sus compromisos y después vendrán las decisiones donde queda claro que urge un cambio de raíz donde se trabaje con transparencia, honestidad, profesionalismo, buscando el sentido de pertenencia e identidad, pero sobre todo rigiéndose bajo el sentido común, conocimiento y no vicios, ni extraños compromisos como actualmente sucede.

@luisdariovera

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