CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- En un estado como Tamaulipas, marcado por la matanza de migrantes y viajeros en San Fernando, el tema de los derechos humanos es uno de los más importantes en el corto plazo, aseguró Mario Cruz Martínez, profesor-investigador de la Universidad Iberoamericana.
Entrevistado acerca de los retos para Tamaulipas en los próximos años, el especialista dijo que la entidad tiene una Comisión Estatal de Derechos Humanos sin recursos y sin profesionalización, con un programa hecho por seguir la moda a nivel nacional pero sin identificar la problemática local.
En su calidad de estado fronterizo, explicó, Tamaulipas debe poner atención al tema de la migración internacional, profesionalizar la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y crear políticas públicas sectoriales que atiendan de manera directa esta problemática y no seguir únicamente la corriente de la agenda nacional.
«Acuérdate de San Fernando; el tema de la migración internacional pues básicamente logró dejar a los actores estatales totalmente postrados frente a una realidad que no sabían cómo enfrentar», dijo el investigador.
«En ese contexto la comisión, por ejemplo, de Tamaulipas, no tiene tantos recursos, no tiene profesionalización y algo que se ha señalado en México ya desde hace muchos años es que en los estados hay un gran problema en cuanto a la designación del titular estatal de derechos humanos».
Para que el tema trascienda e incida en la vida de los tamaulipecos, se requiere un fuerte activismo del Ejecutivo y del propio comisionado estatal en favor de los derechos humanos, lo mismo que una coordinación total entre ambas instituciones, pues sin ésta no hay avances ni resultados en la materia, agregó.
Cruz Martínez dijo que el proyecto del Instituto del Migrante de Tamaulipas ha sido bueno para el estado pero en los hechos su actuación es limitada, porque lo conducen burócratas en vez de especialistas, y no tiene ninguna coordinación efectiva con el Instituto Nacional de Migración o con otras instancias federales o internacionales.
Expresó que estas carencias tanto del Instituto del Migrante como de la falta de políticas sectoriales a nivel estatal en apoyo a extranjeros de tránsito se las comunicó en su momento a Mariana Rodríguez, quien ocupó la Subsecretaría Estatal de Derechos Humanos y posteriormente se convirtió en magistrada.
«Se tiene que buscar la profesionalización en este caso de las comisiones estatales de derechos humanos, porque si no hay profesionalización no va a haber resultados», explicó el investigador.
«Tamaulipas tiene su programa, como me lo dijo Mariana (Rodríguez) pero el problema es que únicamente abordaron el programa para sumarse a la moda.
Cuando se crea un programa de derechos humanos estatal lo que se busca es identificar un problema con los temas que realmente son importantes para cada entidad».
Cruz Martínez dijo que parte del reto para Tamaulipas es crear una verdadera cultura de derechos humanas, una defensa de las garantías ciudadanas ante las decisiones de la autoridad o del Poder Judicial, ya que algunos abogados tamaulipecos comparte la idea errónea de que éstos sólo «defienden a delincuentes», y no entienden el alcance del concepto.
«Porque los derechos humanos lo que buscan es que haya un sistema que diga aquí hay una labor eficiente por parte de la administración estatal o de la administración pública», dijo el académico.
«Lo que se debe hacer es sumar el respeto a los derechos humanos porque de esa manera se crea una base para que se desarrolle con eficiencia un sistema, en este caso el de justicia penal o en cualquier ámbito».
Equipo de expertos
Para Mario Cruz Martínez, un ejemplo exitoso de una comisión estatal activa a influyente es la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Distrito Federal, conducida por un equipo de expertos en la materia, encabezados por Emilio Álvarez Icaza, quien de ahí pasó a presidir la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, agregó.
