CIUDAD MADERO, Tamaulipas.- El olor es muy fuerte, muestra de que el agua barrió con todo, no dejó piedra sobre piedra, en este caso tierra. La humedad penetró todo el cuartito de la casa de Cristina Hernández, que consta sólo de una recámara sin techo, apenas unas tablas que sostienen las bolsas negras que cubren su cabeza, no llega ni a lámina o cartón su techo que está elaborado de bolsas negras.
En él vive con su hijo de un año de edad y en el otro cuartito adjunto su madre con su hermano, no tiene esposo, es mamá soltera y es el sostén de su familia.

Su hogar está justo al borde de la laguna en la colonia Ampliación Las Flores en Madero, una de las zonas recorridas por las autoridades para el recuento de daños por las lluvias torrenciales de este jueves en la zona sur de Tamaulipas.
Se quedaron si luz desde las 9 de la mañana del jueves, ya es viernes y siguen en las mismas, el agua cubrió las tres cuartas partes del cuarto de Cristina, tuvo miedo de pasar la noche a oscuras con el agua tan arriba, pero se aguantó porque quería cuidar de sus pertenencias, que aunque mojadas, son lo único que tiene junto con su familia.
Se arriesgó a los cocodrilos y las víboras que salen cuando sube el nivel de la laguna, aunque nunca como esta vez.

Dice que siempre pasa igual cuando llueve, el agua entra al cuarto pero ahora le llovó más y se sintió más porque como no tiene techo el agua entraba a chorros por su casa.
Lo que queda es el olor fuerte a humedad y lodo que lo cubrió todo, a la entrada de la casa en el patio están los zapatos de ella y los juguetes de su pequeño, una cartera roja, que dan señal de lo que vivió su familia.




