Es innegable que el suministro de medicamentos en los hospitales estatales públicos en Tamaulipas pasó por una crisis tras el cambio de proveedores, pero también lo es que dicha crisis está casi superada y también puede ser que haya habido todo un plan de algunos para que la bronca se le saliera de control al gobierno de Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Así es mis queridos boes, la teoría del complot, se refuerza tras la detención de dos empleados de uno de los hospitales de Madero que escondían medicinas, que transaban con el material médico y que estaban precisamente en el área en que se manejan dichos insumos en el nosocomio.
A los dos empleados, detenidos en calidad de presuntos, los denunció el propio personal médico del hospital; es decir ahí adentro del instituto sabían del tráfico de medicamentos y decidieron terminar con la impunidad.
Estamos hablando de el viernes, día en que se detuvo a los dos ahora presuntos culpables del robo de medicinas, pero recordemos que un día antes el propio Cabeza de Vaca advirtió que ya había denuncias, que en Salud estatal hacían lo que querían con el medicamento y que se lo robaban.
Y es de llamar la atención que miembros del sindicato de trabajadores de Salud le atizan a la teoría del complot acudiendo a los juzgados a donde se presentó a los presuntos culpables a defenderlos, señalando que son inocentes de lo que se les acusa.
¿Verdad que se escucha raro?, ¿verdad que parece que desde dentro estaba orquestado el robo y que no es un hecho aislado, sino que puede ser una práctica sistemática?
Pero, para echarle más ingredientes a la teoría complotista, hay que decir que este fin de semana la Secretaria de Salud, Gloria Molina Gamboa, adelantó que hay otras tres denuncias por las mismas irregularidades; es decir no es que haya uno o dos raterillos de medicinas que se escudaban en su gafete de burócratas estatales, sino que todo hace suponer que había toda una organización dedicada a ese ilícito.
Agreguemos además que los diputados federales del PRI, se vieron muy solícitos, muy afanosos, muy prestitos para abordar el tema de la falta de medicinas, porque hasta pedían la intervención federal, cuando antes les había valido gorro lo que nos pasara a los tamaulipecos, haya sido en salud o en inseguridad.
Las declaraciones de algunos, ahí están en los archivos de los medios, las hacían con tanta enjundia asegurando que no había nada de medicinas, nada de material y hasta aseguraron que se habían cancelado las cirugías en todos los hospitales, como en busca de generar psicosis; como si ellos fueran parte de complot pues.
Eso sí, ninguno de los diputados federales fue para decir: ahí va la lanota que gano por levantar la mano y que con ella se compren medicinas, no llegaron a tanto.
Con los legisladores otros actores de la política y demás ‘comentodólogos’ pretendieron un día sí y el otro también hacer ver al sistema hospitalario como en total parálisis, lo que no ocurrió en ningún momento.
Sé que causaré comezón, pero seamos sensatos ¿se imaginan nada de medicamentos en los hospitales como se decía?, ¿se imaginan ninguna cirugía en los nosocomios como se aseguraba?.
Echémosle cabeza, todos los días a los hospitales abiertos del Estado llegan decenas de heridos graves que pasan de inmediato a quirófano a ser intervenidos de emergencia para evitar que mueran.
Todos los días se hacen decenas de cirugías en los mismos nosocomios ya programados de gente con apendicitis, problemas de vesícula, cáncer, accidentes cerebrales y muchas otras enfermedades que requieren intervención de suma urgencia.
Dichas cirugías requieren, además de quirófanos, mucho material, muchas medicinas ¿se imaginan si la crisis hubiera sido como la trataron de hacer ver cuántos muertos hubiera por esas semanas que se decía que no había ni jeringas, ni nada?.
Insisto, sería inocente, por no decir otra palabrota, señalar que no hubo o que ya no hay problema, pero de ahí a lo que se dijo hay mucha diferencia.
Eso sí, habría que esperar a que cayeran los peses gordos, los que vendían a precio de oro los medicamentos, los que abultaron las cuentas bancarias gracias al negociazo que les duró al menos 12 años, los de apellido ilustre y que se paseaban por Victoria como gente de bien.
Victoria, limpieza general…
Este fin de semana el alcalde, Óscar Almaraz Smer, encabezó operativos de descacharrización en colonias del oriente de la ciudad, se trata de prevenir la proliferación de mosquitos que trasmiten zika y dengue. Además entregó obras de pavimentación hidráulica de varias calles.
Almaraz Smer no ha dejado, por el contrario, le metió acelerador al programa ‘Mis Lentes’ y este fin de semana entero mil más a raza con problemas visuales.
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