Faltan justo dos meses para la crucial jornada electoral del primero de julio, día en que se definirá en las urnas el futuro político, económico y social de México.
Eso es lo que está en juego: el rumbo de la nación. Más allá de la pirotecnia de las campañas, dos modelos de país se encuentran en disputa.
Por un lado, el modelo entre liberal y conservador ofertado por Ricardo Anaya, candidato presidencial de la alianza ‘Por México al Frente’, con una interesante propuesta política configurada en el concepto de ‘gobierno de coalición’ y una visión económica insertada en la tendencia marcada por la globalización.
En la otra esquina, está el proyecto nacionalista planteado por Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’, sustentado en un Estado con mayor participación en la dinámica económica, que toma como base ‘el desarrollo estabilizador’ instrumentado en la década de los cincuentas y sesentas.
Para algunos analistas, es la confrontación de dos modelos, uno que trata de enfilarse hacia el futuro, y otro que parte de las cosas que se hicieron bien en el pasado. Por supuesto, no es tan simple el asunto, pero hay algo de cierto en el planteamiento.
También se puede tomar en cuenta para el análisis, el perfil de los dos principales candidatos a la presidencia de la república. Tiempo, contexto y circunstancia, factores que definen los estilos de aspirar y gobernar. Todo político es producto de su época.
Andrés Manuel López Obrador, quien lleva la delantera en todas las encuestas, es una persona que creció con la visión nacionalista de la década de los sesentas, ligada estrechamente al estilo de Lázaro Cárdenas.
Ricardo Anaya Cortés, que va en segundo lugar en los sondeos y que ganó el primer debate, plantea un esquema de país de acuerdo a su edad (es el más joven de los cinco candidatos presidenciales): un proyecto que apuesta por un futuro multiconectado por la tecnología y con el uso de nuevas energías. Es, sin duda, un proyecto neoliberal, condimentado con propuestas sociales provenientes de sus partidos aliados, el PRD y Movimiento Ciudadano.
Esos son los dos modelos económicos y, por tanto, políticos, que se disputan el futuro del país a dos meses de que llegue el ‘Día D’. ¿Quién ganará?
LA MAESTRA CON LA CNOP Y CON MUJERES
En su calidad de candidata a la alcaldía de Tampico, Magdalena Peraza Guerra asistió el pasado domingo a dos eventos internos del Revolucionario Institucional.
El primero fue un desayuno con mujeres, en un acto realizado en el Salón Pánuco del Hotel Posada de Tampico. Ahí, la maestra acompañó a Yahleel Abdala Carmona, candidata priista a senadora, y a Elvia Holguera Altamirano, aspirante tricolor a la diputación federal por el Octavo Distrito.
Más tarde, Magda Peraza asistió a la entrega de nombramientos de la estructura de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) de Tampico, realizada en el salón ‘Los Faroles’, en la zona centro porteña.
En este evento participaron también Alejandro Guevara Cobos, candidato priista a senador, así como Elvia Holguera. También estuvo presente el presidente del PRI jaibo, José Antonio Marín Flores.
Aprovechando la asistencia de los candidatos del priismo, Víctor Rodríguez tomó protesta y asumió la dirigencia de la CNOP tampiqueña.
ALISTA CAMPAÑA ARMANDO MARTÍNEZ
El candidato de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’ a la alcaldía de Altamira, Armando Martínez Manríquez, ya está listo para comenzar su campaña electoral.
De hecho, su arranque de actividades proselitistas será a las 9 horas del lunes 14 de mayo en la sede del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ubicada en la zona centro altamirense. De ese punto iniciarán un recorrido.
Con el respaldo de Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Encuentro Social (PES), Armando Martínez tratará de hacer historia en Altamira.
Su tocayo, Armando Vera García, coordinador del PT en la localidad, está más que puesto para apoyar la campaña de la coalición en busca de la presidencia municipal.
Mientras llega el día para el comienzo formal del proselitismo en pos de la alcaldía, el candidato morenista afina sus propuestas y proyectos para el municipio, uno de los que registra mayor crecimiento en Tamaulipas.
Y PARA CERRAR…
Una muestra más del pésimo trabajo político de Rigoberto Rodríguez Rangel, dizque dirigente estatal del PES: dejó los comités locales de su ‘mini-partido’ en la zona metropolitana sureña… ¡¡¡en manos de priistas!!!
De ese tamaño es su negligencia y su ineficacia partidista. Normal: ¿Qué se puede esperar de un ‘carga-maletas’?