Si nadie en el gobierno federal ahora que arranque el sexenio de Andrés Manuel López Obrador podrá ganar más de 108 mil pesos, la que sigue podría ser una administración sin los mejores hombres, sin las mejores mujeres profesionistas del país; sueldo generalmente está equiparado a productividad.
Así es mis queridos boes, ya se que los defensores a ciegas del presidente electo van a decir: pero si ahorita ganan millonadas y están bien mensos (la palabra correcta es altisonante), pero si la promesa es tener el mejor gobierno de la historia moderna que nos encamine a la también promesa de la cuarta transformación no creo que se vaya a dar con profesionistas segundones.
Y es que una secretaria de estado, una coordinación general, una dirección general en el gobierno de la República, incluso es más importante que un cargo similar en una empresa que distribuye refrescos, ropa de marca, bufetes de abogados, de contadores, de representaciones y demás y podría asegurar que cualquier ejecutivo en esas empresas ahora gana igual o más que el próximo presidente.
Claro que el de AMLO será tal vez su segundo sueldo luego de que hace casi dos décadas fue jefe de gobierno del ex Distrito Federal y tal vez su amor por México le permita ofertar su esfuerzo por menos de la mitad de lo que hoy gana Enrique Peña Nieto, quien se supone percibe alrededor de 270 mil pesos, pero ¿el resto de los funcionarías también lo harán por amor al arte?.
Miren, los mejores abogados del país, los de los bufetes de renombre ganan hasta 40 millones de pesos al año, infinitamente más de lo que ganarían si trabajarán en la administración que viene.
Es cierto en todas las profesiones hay mafias, hay sobre pagos, pero no es la regla, como tampoco lo es que los mejores profesionistas sean los que mejor ganan, pero si es casi una regla que los mejores cobran más que los que no lo son.
También es cierto que el gabinete que López Obrador ha adelantado está dominado por gente mayor, muchos de ellos con carreras importantes en sus áreas, pero también lo es que un secretario necesita un staff, un equipo de trabajo, decenas de buenos abogados, de buenos contadores, de gente con experiencia y preparación académica suficiente, porque la empresa no es un puesto de tortas o una lavandería; es la presidencia de la República.
No me imagino a un excelente abogado en Gobernación ganando la mitad de lo del Peje; es decir 55 mil pesos, porque eso lo ganaría en unos días por afuera, con un cliente de dos días.
Porque además es gente que se quemó las pestañas en maestrías y doctorados en la UNAM, Harvard, Yale y demás, por lo que dudo que vayan a regalar su trabajo.
Insisto el riesgo es que tengamos servidores públicos sin las tablas suficientes para lo que se ha prometido
Porque en verdad, publicaciones especializadas en México indican que un ejecutivo de Procter and Gamble, PepsiCo, Cemex, Ford, TelMex, Televisa o Bimbo ganan más de lo que va a ganar un director o coordinador en el gobierno entrante y la responsabilidad es muchísima más en el ámbito público.
El riesgo además de profesionistas chafones, es que muy pronto la política no sea una área de interés de la gente de bien, porque los sueldos no serán competitivos.
Pero además, y ahí el riesgo mayor, que los vacíos que los buenos profesionistas dejen por los sueldos míseros, sean ocupados por vivales que lleguen a la administración pública con el ánimo de cobrarse a lo chino; es decir con moches y corrupción.
Y van a decir los adoctrinados, ¿a poco ahorita no hay moches y corrupción?, claro que los hay, pero la promesa es que ya no haya, el compromiso es la cuarta transformación, pero con esos sueldos me temo que se le está dejando abierta la puerta a la corrupción.
Ojalá, otra vez lo digo, me equivoque, porque el éxito del próximo gobierno será el éxito general del país, pero no podemos solo tener fe sin señalar las dudas, aprobado lo que a todas luces nos genera suspicacias, nos suena extraño.
Petrocel y la negligencia…
Ayer ardió una planta de Petrocel en el Corredor Industrial de Altamira, fueron tres horas de angustia. Quedó de manifiesto que la empresa no estaba preparada para hacerle
frente al accidente, entraron al quite los vecinos.
La noticia se da un día después de que publicamos que las empresas deben 25 millones de pesos a la Comapa Altamira y entonces nos preguntamos ¿qué tanta responsabilidad tienen las industrias que exprimen los recursos naturales de nuestra entidad?, ¿no sería bueno que alguien les aplicara mano dura?.
Comentarios:
meliton-garcia@hotmail.com
Twitter: @melitong
