CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- La cuenta regresiva para designar al Presidente del PRI en Tamaulipas se puso en marcha. El problema, son las condiciones en que se encuentra el partido en estos momentos. Es la tercera fuerza política en Tamaulipas, está en bancarrota, hay una militancia en fuga y la que continua en el partido reprocha el comportamiento acusa de traiciones y de mantener una política excluyente a la actual dirigencia.
Los grupos políticos se van desvaneciendo pero se mantiene todavía la influencia del ex gobernador Egidio Torre, señalado como el priista que sumió al PRI en Tamaulipas. Oscar Luebbert parece jubilado de la polìtica, Baltazar Hinojosa está alejado de las decisiones futuristas de su partido en el Estado; Edgardo Melhem está perdido y el senador Manuel Cavazos Lerma ni quiere saber nada del PRI en Tamaulipas porque lo acusa de la candidatura fallida de su hijo Miguelito.
Ex candidatos, Consejeros Políticos, y ex dirigentes del partido, coinciden en que “hay ganas en muchos municipios de participar, pero navegan sin ideas”.
Observan una base de 350 mil votos, pero se encaminan a una elección intermedia en donde los únicos que ganan son quienes tienen estructura, advierten.
Priistas como Yalheel Abdala Carmona ex candidata al Senado y una de las priista que es vista por el CEN para designarla, admite que la reconstrucción del partido no se va lograr en un año.
Lo más difícil, advierte por su parte Luis Enrique Rodríguez Sánchez, es que el PRI se encamina, no solo a una refundación, si no a resolver emprender la tarea de mantenerse vigente y no perder más votos de los que tienen de base.
Sobre todo, en una elección intermedia de diputados locales donde se vota poco, pero quien gana se impone porque moviliza más a sus estructura y el PRI carece de eso, frente a un PAN que tiene todo para no perder la mayoría del Congreso y contra un partido como Morena que está obsesionado y seguro de obtener el control del Poder Legislativo en Tamaulipas. Los morenistas que piensan buscar una candidarura se atienen a la votacion obtenida en la pasada eleción presidencial.
El escenario es tan grave desde el PRI que, no solamente temen a perder más votos y a teminar como un partido del “chiquitiaje”vivir si no a perder el registro como instituto político en Tamaulipas.
¿Quién puede enfrentar esta carrera y mejorar las condiciones del PRI?, se cuestiona.
La respuesta no existe todavía, pero el CEN del PRI, tiene una lista de al menos diez Tamaulipecos que podrían ser designados para dirigir a este partido en el Estado.
La lista la encabeza Yahleel Abdala Carmona, Enrique Cárdenas del Avellano, Alejandro Etienne Llano, César García Coronado, Miguel Manzur, Emilio Grimaldo, Humberto Valdez Richaud, Mónica González García, Edgar Melhem Salinas y Copitzi Yesenia Hernández García.
Algunos de los priistas citados comenzaron a recibir llamadas de la Presidenta Nacional del PRI Claudia Ruiz Massieu. Una de esas llamadas fue a la ex candidata al Senado de la República Yahleel Abdala.
En los consensos, Yahleel aparece como una de las principales figuras para dirigir al PRI y Claudia Ruíz Massieu se lo dijo y la invitó a dirigir el partido. La tamaulipeca rechazó la oferta y expuso sus argumentos y hasta reclamos, como el triste papel que hizo el CEN en Tamaulipas desde el 2016.
La información que trascendió es que la Presidenta Nacional del PRI, expuso que en el 2019, habrá cinco elecciones locales de Diputados y eso permitirá dar más atención del CEN a los Estados y Tamaulipas está en esa prioridad.
De no existir cambios, el lunes 20 de agosto, Yahleel Abdala se entrevistará en la ciudad de México con la Presidenta Nacional Claudia Ruíz. Los priistas, ven muy apegada a Yahleel Abdala en el grupo de Egidio Torre y con un sector del desprestigiado gremio petrolero.
La operación política de Enrique Cárdenas, sin grupo político, se está extendiendo y el cabildeo para lograr la designación está en marcha. Hay en cambio, llamadas a ex dirigentes de partido y Consejeros Políticos para ir construyendo una alianza.
Pero en el trabajo interno, el actual delegado de la SCT en San Luis Potosí César García Coronado, está realizando recorridos en algunos municipios del Estado, aunque sus reuniones son con cinco o diez priistas.
García Coronado, no solo ha confirmado su aspiración por la dirigencia del PRI en Tamaulipas, también ha puesto sobre la mesa el respaldo del senador electo Miguel Ángel Osorio Chong quien tras la derrota electoral del primero de Julio ha buscado convertirse en interlocutor con el nuevo gobierno federal y con los protagonistas principales de la nueva etapa política que vive el país
García Coronado, quien fue funcionario en el gibierno de Eugenio Hernández y tiempo desoues se incorporo al grupo de Ososiro Chong, se ha estado reuniendo en privado con priistas de la Frontera y del Sur del Estado..
Otro personaje que ha estado metiendo su mano en este proceso, aunque no como aspirante, es la tampiqueña Paloma Guillén San Vicente, suplente y amiga personal de Claudia Ruíz Massieu como Senadora. Paloma platcó con Cesar Garcia y con Enrique Cardenas pero se sabe que sus cabildeos son en favor de Enrique, quien es delegado de SEGOB en Nuevo León y Tamaulipas.
En el mismo CEN ven un plan C: Alejandro Etienne Llano, un eslabón más del ex gobernador Egidio Torre..
“Si este grupo se mantiene en el PRI, todo seguirá igual; no solo entregaron el partido, se encargaron de maltratar a los priistas y despojarlos de lo que tuvieran para perder”, reclama Humberto Valdez Richaud, Secretario general del Movimiento Territorial.
Uno de los puntos que remarca Humberto Valdez, es el cierre de las oficinas del MT, una organización que podría movilizar hasta 40 mil votos. En la última etapa de organización, reclama, el PRI de Sergio Guajardo orilló a la CNOP a cerrar sus oficinas, donde también ocupaba un espacio el MT.
Valdez señala que tanto Alejandro Etienne como Mónica González, han levantado la mano para dirigir al PRI, dos priistas incondicionales del ex gobernador al que culpan de la gran derrota registrada en el 2016.
Avizora El Betico que en un escenario donde el Presidente del Partido y la Secretaria General buscan ser diputados (Etienne y Mónica) y van a querer ir en el lugar 1 y 2 de la lista plurinominal para reelegirse con el costo de no ganar ningún distrito de mayoría.
Efraín de León, reprocha severamente que Sergio Guajardo haya abandonado a la CNOP.
“Es un dirigente con mucha hambre y debe irse lo más pronto posible”, exige De León. Adelanta: “Va a ser muy difícil que pueda revivir el PRI, yo pensé que Guajardo podía meterle oxígeno al PRI, pero le metió veneno”.
Para Erubiel Alonso, Delegado del CEN del PRI en Tamaulipas, no se va imponer ningún grupo político y a través de sus redes social lo afirmó: “en esta nueva etapa que gané el priismo y no el grupismo”.
La crisis apetitosa
El PRI en Tamaulipas, no deja de ser una franquicia apetitosa para la clase política que está en la cúpula.
Si bien tiene una grave crisis económica y en el camino viene una nueva multa de poco más de 3 millones de pesos que el INE ya impuso, el manejo del poder y los nuevos acuerdos o alianzas incluso con Morena que pudieran darse en el futuro, lo hacen atractivo.
Incluso, en el 2019, el Financiamiento Público va crecer, porque el presupuesto se va distribuir entre tres partidos políticos y ya no 9, como hasta hoy existen en Tamaulipas.
El haber perdido las prerrogativas, hasta este momento, al menos seis partidos, ponen un mejor escenario económico al PRI, a diferencia de lo que vivió en el 2018 y donde enfrentó una multa de más de 15 millones de pesos y que fueron descontados de los 33 millones de pesos que recibiría.
El problema es que en las próximas elecciones, son contiendas donde vota al menos el 40 por ciento de la lista nominal del padrón. Sin pasar por alto que, para la elección de Diputados del 2019, quienes tengan una mayor estructura y movilización es quien va ganar.
Así pasó en las elecciones locales en los sexenios de Eugenio Hernández Flores y de Egidio Torre donde arrasaban porque, la gente no participaba y se ganaba con la estructura de 400 o 450 mil votos.
La realidad ahora, es que la estructura la tiene el Partido Acción Nacional y a Morena no le será fácil construir una estructura aunque tendrá el empuje de los delegados regionales y del Coordinador estatal.
Los priistas consultados, consideran que de septiembre 2018 al mes de abril del 2019, el PRI tiene la oportunidad de tomar oxígeno y construir un escenario donde mantenga los votos que obtuvo el pasado primero de julio.
A más tardar, a finales de agosto o en la primera semana del mes de septiembre, el CEN deberá designar al nuevo Presidente del partido y en esta decisión quedarán fuera los grupos políticos locales.
Los proceso de derrotas que enfrenta el PRI desde el 2016 y pulverizado a los grupos políticos. Ahora sin decisiones nacionales las que mandan en el Estado.
En municipios como Nuevo Laredo donde el PRI se fue al tercer lugar, lo mismo que en matamoros, en Reynosa, muestran que los grupos políticos ya no tienen tanta fuerza.
Lugares como Tampico y Ciudad Victoria donde el PRI se colocó en segundo lugar, con la alcaldesa Magdalena Peraza se desconoce cómo va amanecer al día siguiente.
Los grupos se desdibujaron además en municipios como El Mante, Ciudad Madero, Altamira, González, Río Bravo entre otros donde se fueron al tercer lugar.
A la fecha, las líderes de la estructura del PRI en Ciudad Victoria, se brincaron ya al partido de AMLO o al PAN para iniciar el trabajo de operación política en las colonias.
La crisis comenzó a tomar otro color, cuando algunos Presidentes de los Comités Municipales del PRI comenzaron a renunciar, entre ellos Ambrosio Ramírez Picasso y a quien también se le observa ya en el Partido de Movimiento de Regeneración Nacional.
Para los viejos del PRI, las derrotas que está documentando el PRI, es el resultado que sumaron los líderes de grupo que decidieron dejar el Estado y mandar designaciones desde el centro o de los vecinos estados.
¿QUIEN LE ENTRA CON DINERO?
Una de las salidas que el PRI tiene ahora, es que sus estatutos les permiten designar candidatos sin la necesidad de ser militantes, es decir, la figura que permitió a José Antonio Meade ser candidato a la Presidencia de la República, está vigente.
El dilema que tienen hoy los priistas en Tamaulipas, es: ¿Quién está decidido a invertir dos o tres millones de pesos para las campañas a Diputados?
Aun y si ganará la elección, la inversión que podrían hacer los candidatos del PRI, no les permitiría recuperar sus gastos desde la designación hasta, precampaña y campaña frente a sus adversarios que, tendrán todo el apoyo para movilizaciones y pago de estructura.
Los empresarios o ‘benefactores’ del PRI, hoy están del lado del Gobierno, los priistas presumen que pudiera ser por el compromiso del trabajo o por agachones, dicen.
Uno de los principales reclamos a Sergio Guajardo fue la falta de recursos económicos y apoyo para los candidatos, la estructura y el mantenimiento de los Comités Municipales..




