Cuando la nueva gerencia de la Comapa Victoria le rasque ahí donde huele mal de la dependencia que dejará ya prontito Gustavo Rivera Rodríguez lo que saldrá no será agua, saldrán chorros de pus, complacencia, complicidad, corrupción.
Así es mis queridos boes, el problema es mayor en la Comapa de la capital de Tamaulipas, no solo porque hay decenas de colonias a las que no llega el servicio en meses, sino porque la paramunicipal arrastra una serie de irregularidades que la pueden incluso llevar a la declaratoria de quiebra.
Si, el problema que más se ve es el de la falta de líquido por muchos sectores de la ciudad, las mentadas hacia los directivos de la Comapa han inundado las redes sociales, pero pareciera que ahí se aplica la máxima priista/salinista de: ni los veo ni los oigo.
Hasta donde nuestra fuente interna de la Comapa nos revela, por ejemplo, esta que de una docena de pipas que apoyaban el reparto de agua, allá a donde se los grifos solo sale aire que se cobra como H2O, desde hace semanas solo funcionan cuatro, lo que ha acrecentado el encabronamiento de decenas de miles de familias.
Pero ahí lo peor está por venir, porque cuando estamos a 27 días del relevo municipal y por lo tanto de la gerencia de Comapa, salta la versión de que la dependencia debe muchos millones de pesos por concepto de derechos del uso de líquido a la CNA y la Federación ya ha reclamado el adeudo que la gerencia ‘olvido’ liquidar.
Ello sin contar con el incumplimiento del pago a la CFE que tampoco es cosa menor y que puede poner en riesgo al ya de por sí deficiente servicio.
La amenaza de ‘Doña Fede’ ya fue lanzada y el que pagaría los platos rotos sería el próximo alcalde y obviamente el próximo gerente de la Comapa, toda vez que se
retendrían esos millones de deuda de las participaciones federales que deben llegar a Victoria.
Puede ser una pésima noticia para la administración panista que se estrena en octubre, porque eso significaría hartos problemas para enfrentar el gasto corriente y otras obligaciones propias del Ayuntamiento.
Pero además, hay versiones, con papelito de por medio y todo, que dan cuenta de irregularidades que dejarían muy, pero muy mal parada a la gerencia actual, luego de que en la lista de ‘asesores’ hay maestros especializados en áreas tan particulares que se requerirían conocimientos de ingeniería, de biología y demás.
Es decir, que hay una lista de notables amigos que han cobrado como si fueran súper asesores y nomas se ocupan de cobrar jugosos sueldos y prestaciones que no devengan.
Insisto van a saltar chispas en esa entrega-recepción que por cierto inició formalmente el sábado y que está semana va a tener agenda importante, porque ya hay toda una serie de planteamientos de información que ha sido requerida por los que vienen.
Lo que ocurra con la Comapa Victoria, les aseguro tendrá repercusiones mucho más allá del ámbito de dicha dependencia, pondrá de hecho en serios predicamentos a algunos que traen proyectos en el corto plazo y éstos podrían darse por descarrilados si las cosas salen como nos las pintan.
Por lo pronto el sábado fue presentado Humberto Calderón Zúñiga, como el encargado de recibir de manos de Gustavo Rivera la Comapa.
Calderón Zúñiga podría perfilarse como el futuro gerente, aunque eso corresponderá decidirlo al alcalde que viene Xicoténcatl González y a los mandos superiores.
Vaya paquete que se echará a cuestas Calderón Zúñiga, porque dar solución a un problema que se dejó crecer tanto no será nada fácil. De hecho creo que las promesas de campaña de darle respuesta pronta a la situación tal vez fueron apresuradas, porque hasta donde se sabe la bronca es sumamente compleja y lo usuarios ya esperan para el 1 de octubre para estar reclamando soluciones.
Y es que no es lo mismo prometer que cumplir, por eso habrá que poner en el tema, alma, corazón, bastante cerebro y recibir además líquido abundante del cielo, sino ya veo movilizaciones de protesta reclamando lo que se prometió.
¿Y las delegaciones?
Tema aparte debe ser el estado que guardan las delegaciones federales ante el cambio de colores a nivel federal.
Solo le adelanto que hay algunos delegados que no deben estar durmiendo sus ocho horas de rigor, ante la pesadilla que debe ser estar pensando en cómo arreglar el cochinero que tienen en áreas de compras, ejecución de obras y nóminas.
Porque muchos hicieron o incrementaron sus fortunas con la adjudicación tramposa de obras y la compra de materiales y equipos a sus cuates, lo que se descubrirá más temprano que tarde.
