CIUDAD DE MÉXICO.- Las estrellas se alinearon y un nuevo partido ha llegado al poder en México de la mano de Andrés Manuel López Obrador, un carismático líder que junto a Morena se va a encargar de presidir a los Estados Unidos Mexicanos como nuevo presidente de la nación.
Si bien el ahora Jefe de Estado se ha encontrado rodeado de polémicas desde su campaña presidencial así como los miembros de su partido que pasarán a la Administración Pública esto no quita que el experimentado político haya llegado al poder con una mayoría de votos abismal que nunca antes se había visto en los estándares electorales de la nación latinoamericana.
Tocará observar como este nuevo presidente junto a su nuevo grupo del Ejecutivo buscarán solucionar los conflictos y problemas colectivos que afectan a la nación tanto a nivel nacional como internacional. Tras unos problemas en lo referente a política migratoria con el gobierno de los Estados Unidos, los problemas de deuda externa que aquejan a la nación desde años además de su reconocido problema de inseguridad y tráfico de drogas no hay duda de que los nuevos personajes de poder de la nación norteamericana tendrán mucho trabajo por hacer para sustentar e apoyo recibido por la apabullante mayoría mexicana que se manifestó en los meses anteriores, todos bajo un único objetivo en común: “Queremos soluciones”.
Y es que esta ha sido la consigna general más aclamada por los ciudadanos conforme pasaron los años y los problemas internos del territorio se acrecentaban. Hoy en día es imposible para alguien no estar enterado sobre los problemas de tráfico de drogas, corrupción, inseguridad y violencia que engloba a una de las naciones latinoamericanas más desarrolladas del momento.
No obstante, varios de los relacionados con AMLO ya han puesto manos a la obra para poder sobreponerse a estos problemas de carácter interno. Comenzando con un debate sobre posibles soluciones y considerando todas sus variables todo parece indicar que una de las más rumoreadas políticas verá la luz apenas tome posesión el recién candidato electo.
Se trata de una medida de despenalización de una de las sustancias ilícitas que más se trafica en el territorio mexicano: la marihuana. De esta manera se espera que los crímenes de violencia asociados al tráfico de este estupefaciente sean reducidos de gran manera, generando la pérdida de un mercado para estos delincuentes y permitiendo a la persona adquirir dicho producto bajo fines medicinales a través de las autoridades competentes.
La casi segura decisión por parte del Ejecutivo ha tomado a propios y ajenos por sorpresa por lo que pudiera significar una medida muy desconcertante por parte de la administración según los grupos opositores así como una muy efectiva por parte de adeptos al nuevo proceso.
Lo cierto es que ninguna política aplicada en relación a este tema será visto sin denotar las consecuencias positivas y negativas por lo que ambos lados deberán trabajar bajo un concepto de unidad si se quiere abogar por una posible solución a un problema que ha cobrado demasiadas víctimas y sigue en aumento. La solución debe llegar a la nación cuanto antes.




