PÁNUCO, VER.- Asegurando haber escuchado la voz de Dios que le ordenó arrollar a un motociclista, cafre sujeto ocasionó aparatoso choque, embistiendo a un motorizado para luego chocar contra un restaurante.
El fuerte percance vial, se presentó cerca de las 08:00 horas, sobre boulevard Allende de la zona centro, la unidad responsable fue una camioneta Chevrolet tipo pick up color azul, conducida por Gregorio «C» de 53 años de edad con domicilio en Paso Real.
La unidad se desplazaba a exceso de velocidad y trepó al camellón para derribar plantas y árboles, para después llevarse a un motociclista que circulaba por la avenida.
La loca carrera no paró, hasta terminar en la calle Ignacio de la Llave proyectándose en el restaurante «los Jarochos».
La persona que circulaba en la motocicleta, color rojo, fue identificada como Eduardo «S» de 47 años de edad con domicilio en Vega de Otates.
El conductor de la frágil unidad motriz quedó con lesiones en el cuerpo, por lo que fue trasladado por paramédicos de Cruz Roja, al hospital de esta ciudad, al igual que al conductor de la camioneta.
El desquiciado cafre fue detenido por Policías Preventivos en el sitio de los hechos y al dar su versión del accidente dijo que «Dios lo había mandado para que atropellara al señor de la motocicleta».
Al punto acudieron paramédicos de cruz ámbar, tránsito del estado, policía municipal, guardia nacional y fuerza civil siendo el área asegurada para retirar la unidad destrozada.
