CIUDAD MADERO, TAMAULIPAS.- El cierre de Playa Miramar a causa de las bajas temperaturas ha ocasionado afectaciones a más de 300 ambulantes, algunos solo se instalan en los accesos al paseo turístico o en el camellón del Bulevar Costero.
Por el ingreso de los frentes fríos, autoridades de turismo, así como de protección civil de Madero han mantenido bandera negra en las torres de guardavidas, es decir está prohibido el ingreso de personas al mar.
“Habíamos tenido una muy buena racha de ventas a raíz de la reapertura, sin embargo esta última semana las ventas se han desplomado y como la gente no puede entrar a la zona de playa, solo podemos colocarnos en el camellón del bulevar costero o en las entradas”, detalló el vendedor Mario Fernández Hernández.
Desde que se autorizó la reapertura de playa a mediados de octubre, solo regresaron el 50 por ciento de los ambulantes que normalmente había, ya que no todos tuvieron los recursos económicos para poder surtir los puestos, debido a que el paseo turístico estuvo cerrado siete meses.
“No ha sido lo mismo por la pandemia del Covid, hay personas que no han podido regresar a la playa porque no tienen dinero y se han visto obligados a buscar otro tipo de trabajo”.
POR Oscar Figueroa