TAMAULIPAS.- Cuando el PRI era amo y señor de México las campañas electorales de concentraciones multitudinarias y apabullantes borraban del escenario político a los candidatos de los partidos de la oposición, desafortunadamente esa práctica persiste.
Igual que el derroche de recursos, la simulación y los acarreos.
En el actual proceso por las gubernaturas de Hidalgo, Durango, Michoacán, Quintana Roo, Aguascalientes y Tamaulipas, por ejemplo, ocurre lo mismo que décadas atrás: los espacios son dominados, ahora por los contendientes de la alianza del PAN, con el PRI y el PRD.
Las cosas en ese aspecto no han cambiado.
Aunque saben que ya no es tan fácil engatusar a los votantes, los partidos políticos que gobiernan las entidades federativas tratan de demostrar con fotografías y videos que publicitariamente la oposición no existe y que, aunque las encuestas digan lo contrario, los ciudadanos piensen que los que más salen en la tele y lleven más gente a los eventos serán los triunfadores.
Eso está bien como estrategia, sin embargo, en donde parece que los panistas perdieron la pista es en criticar a Morena por haberles abierto la puerta de la agrupación a los priistas e incluso de que es otro PRI, parece que no se han dado cuenta de que Acción Nacional ha firmado una alianza electoral con el Revolucionario Institucional, sin importarle que este sea el partido más repudiado y corrupto de México.
¿Acaso olvidaron asimismo ya que en el proceso electoral del año pasado, una buena parte de sus candidatos, como Yahlell Abdala y Miguel Almaraz Smer provenían del PRI y que ahora trabajan de la mano de sus ex acérrimos adversarios Edgar Melhem, Enrique Cárdenas del Avellano y Ramiro Ramos Salinas?
Por supuesto que la Cuarta Transformación también cojea del mismo pie, el actual candidato a gobernador, Américo Villarreal, fue priista, igual que el diputado Erasmo González Robledo, Olga Sosa Ruiz y Eduardo Hernández Chavarría, entre otros.
Algo que la militancia albiazul, por otra parte, no entiende es como es que, no obstante que en los comicios del 2021 perdieron el municipio y los distritos electorales de ciudad Madero, han vuelto encargar la operación electoral a los mismos estrategas que resultaron derrotados, a saber, Guadalupe González Galván, Ernesto Gutiérrez Rodríguez y Jaime Turrubiates Solís.
Mientras tanto, sigue el duelo de mensajes de los principales candidatos al gobierno estatal. “Los privilegios de unos cuantos se acabaron, ahora vamos a dejar atrás el modelo viejo y corrupto y nunca más un gobierno rico y un pueblo pobre”, estos de Villarreal Anaya.
El Truko César Verástegui Ostos, que tratará de darle una segunda vuelta a la entidad antes del 10 febrero cuando concluirá la etapa de la precampaña, en cambio, demostró en Soto la Marina que es una fuerza que multiplica y encabeza reuniones con representantes de los todos los sectores sociales, obreros, campesinos, profesionistas y empresarios.
Para cerrar, los funcionarios de los tres niveles de gobierno se han visto obligados a guardar silencio durante los próximos 4 meses. Como consecuencia de la doble veda electoral, la impuesta por la consulta de revocación de mandato y la disputa de la gubernatura, no podrán cacarear ni presumir públicamente las obras de beneficio social.
El trabajo no se detendrá, por supuesto, pero ellos tendrán que ingeniárselas para no pasar inadvertidos.
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