MÉXICO.- Adolfo Ríos, director deportivo de Gallos Blancos de Querétaro reprobó la violencia con la que cual actuaron los aficionados del equipo durante el último encuentro contra el Atlas de Guadalajara.
Aseguró que se están llevando a cabo las investigaciones para determinar en qué momento falló el dispositivo de seguridad y cómo se originó la violencia dentro del estadio.
Calificó los hechos de inexplicables, debido a que había protocolos de seguridad previos al juego, pero que todo sucedió tan rápido que no hubo forma de reaccionar ante los hechos.
Destacó que ya se han empezado las investigaciones correspondientes para castigar a los agresores, así como para los responsables de la empresa de seguridad que omitieron realizar su trabajo.
En entrevista con Adela Micha, el representante del equipo indicó que estuvo en el lugar y vio cuando varias personas comenzaron a golpear a familias, por lo que él y su hijo ayudaron a algunos a llegar a las ambulancias.
“Mi hijo bajó y se expuso a eso, pero realmente lo hicimos porque no había una situación de certeza de que alguien pudiera ayudar a la gente que estaban golpeando”.
Explicó que el conjunto respetará las decisiones a las que llegará la Federación Mexicana de Futbol, aunque aseguró que el asunto está relacionado con hechos que no tienen que ver con el desempeño de los jugadores en la cancha. Dio a conocer que el equipo y sus integrantes han recibido amenazas en contra de ellos y sus familias.
“Acá fueron delincuentes disfrazados de aficionados”, dijo.
Indicó que se está buscando identificar a cada uno de los aficionados para que se pueda determinar quiénes son los individuos que acuden a los estadios.
Agregó que se está buscando la coordinación entre las autoridades para poder hallar a los culpables de estas agresiones y presentarlo ante la justicia.
Comentó que la postura de Querétaro en la reunión que tendrán los equipos será la de hablar con la verdad y establecer los protocolos necesario para que las personas puedan estar seguras en los juegos de la liga. Explicó que la mayor parte de las barras mantuvieron su lugar dentro del estado.
“Nosotros vamos a aceptar la autoridad que tenemos que es la FMF”, dijo.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO