Existen dudas respecto del papel que el INE desempeña en la democracia republicana. Algunas de ellas con frecuencia salen a relucir durante “las mañaneras” y otras forman parte de la memoria pública, lo cual desprestigia al señalado organismo que pareciera funcionar de acuerdo a intereses creados por el neoliberalismo. Recordéis que Lorenzo Córdova su presidente, es consejero desde los tiempos de Felipe Calderón siendo con Peña Nieto que adquirió la privilegiada posición que ostenta, lo cual no debió ser gratuito, opina el columnista.
Lo cierto es que el INE está convertido en adversario declarado de la 4T y por supuesto del partido mayoritario. ¿Acaso no utilizó pretextos infantiles para tumbar candidaturas estatales a Morena, como la de Guerrero por ejemplo?. E igual lo pretendió en Michoacán donde el perredista Silvano Aureoles se adjudicó el estado cual propiedad personal, resultando de tan alto grado la corrupción que es investigado por la Fiscalía General con posibilidades de ir a la cárcel.
De manera que el INE no oculta sus diferencias con la 4T. Ahora mismo la polémica es en torno de la Revocación de Mandato cuya consulta debe llevarse a cabo el próximo diez de abril. En este sentido pareciera que el organismo electoral hace esfuerzos para que el proceso fracase dejando en evidencia a AMLO, objetivo en el que coincide con las incesantes campañas sucias de los ultra conservadores enemigos del Presidente de México.
Para el efecto existen sospechas de que utilizará los viejos métodos del priismo como el llamado “ratón loco”, caracterizado por esconder casillas desesperando al ciudadano que finalmente desiste emitir su voto. Esta clase de artimañas ya dio buen resultado al INE durante aquella consulta sobre el enjuiciamiento de los ex presidentes. (En este caso el columnista vivió la experiencia de buscar por horas la casilla correspondiente, cuando en elecciones normales la encuentra a tres cuadras de su domicilio). Por obvias y sobradas razones, el INE no quiso que se tocara ni con el pétalo de una rosa a los causantes del saqueo y la corrupción, de ahí la escasa votación obtenida para que fuesen llamados a cuentas. Otra forma de regatear la votación, es no entregando suficientes boletas.
En cuanto a la Revocación de Mandato, el 14 del presente mes se venció el plazo para que el INE publicara la ubicación de las casillas. Y no lo hizo porque la ley le importa pura y llana progenitora. Sea que le vale madre (dicho sea con todo respeto), tanto, que los consejeros permanecen amparados contra el mandato constitucional de no percibir mayor sueldo que el Presidente de México.
NO MÁS RIDÍCULOS, PLIS.
Ahora resulta que una de las diputadas locales distanciadas de su partido por motivos no fáciles de comprender, (ire,ire), promete al igual que otro de sus compañeros en las mismas circunstancias, que la próxima semana han de reconciliarse con Morena, como si nada hubiera sucedido. Y deje que hasta pronostica la probable recuperación de la presidencia de la coordinación política que en sorprendente operativo recién cayera en manos del PAN.
Dicese de reuniones con algunos dirigentes donde “limaron asperezas” por lo que “todo volverá a la normalidad”. Y uno levanta la ceja izquierda, suponiendo que la negociación involucra a Armando Zertuche Zuani de quien se rumora, es el centro de la discordia, ¿será solo eso?. Si llegara a suceder lo que la diputada supone, observaríamos un escenario francamente increíble, de lo que son capaces de hacer legisladores en situación de indigencia ideológica, o de pérdida forzada de la memoria, que pa’l caso es lo mismo.
El asunto es que está en cartelera otra función de temporada que solo servirá para declarar formalmente al congreso local como “la gran carpa de la comedia”.
SUCEDE QUE
A propo, eso de ratificar a Zertuche como “líder” del grupo morenista no tiene otro calificativo que “masoquismo en cuarta dimensión”, digo yo.
Y hasta la próxima.
Por Max Ávila