TAMPICO, TAM.- Son mil 400 trabajadores del Hospital General de Tampico «Carlos Canseco» quienes brindan servicio bajo protesta ante la falta de medicamentos e insumos.
María Concepción Romero Hernández, secretaria del sindicato de la sección 51 subsección 5 y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud encabezó la protesta a las afueras del Hospital, dijo que esta problemática inició hace 4 meses.
Declaró que la necesidad más sentida es el material de consumo diario como: gasas, jeringas, soluciones, punzocat, venoset, metricet, equipos de bomba, guantes, gasas y medicamentos, entre otros.
«Las compañeras se ven en la necesidad de reutilizar las jeringas, comprar sus propios guantes, nosotros lo que queremos como sindicato es que nos deslinde a personal de enfermería de cualquier implicación legal que pudiera ocurrir, porque estoy atendiendo a la gente que la verdad mis respetos, se inconforma y debate, pero no somos responsables de la falta de material, solo cumplimos con nuestro trabajo».
Acompañada por más de 30 personas, levantaron la voz a las afueras del Hospital, colocando dos lonas como parte de la queja.
Comprometidos con su labor, han tenido que comprar material por su propia cuenta, gastando mucho dinero de manera semanal, pese a que sus ingresos son muy inferiores.
También, los propios pacientes acuden a las farmacias para buscar sus medicamentos, aún y cuando no hay seguridad de insumos, el hospital realiza operaciones.
Destacó que la calidad de atención se derrumbó cuando tuvieron que cooperarse entre trabajadores para que en la cocina se puedan preparar los alimentos.
«El agua que no dan es marca patito, sabe horrible, bajó la calidad, de un año acá no hay agua para el personal, pacientes, en la cocina la gente hace los alimentos de ‘coperacha’, ésta es una situación insostenible pero ésta es nuestra casa, queremos el hospital, pero sin el recurso nos es riesgoso».
La falta de guantes y equipo médico ha provocado que se infecten de covid, sin embargo, no tiran la toalla y esperan que pronto las autoridades federales y estatales den solución a la severa crisis que enfrentan.
Por Javier Cortés