TAMPICO TAMAULIPAS .- En la zona metropolitana del sur de Tamaulipas hay 44 mil 457 viviendas de interés social abandonadas, destruidas, ocupadas y/o invadidas.
De acuerdo con el Censo 2021 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Altamira concentra 23 mil 915, Tampico 12 mil 517 y Ciudad Madero 8 mil 325.
Sebastián Domínguez, delegado en la zona sur de Tamaulipas de la asociación de colonos «Esfuerzo Legal» revela que de acuerdo con un censo realizado en 2022, es en Altamira, en donde se concentra el 98 por ciento de estas construcciones.
En el municipio bajo este esquema se contabilizan 10 mil 378 viviendas en las zonas de fraccionamientos o áreas clasificadas de interés social.
«De acuerdo con el censo , se tiene contabilizados 5 mil 148 casas-habitación habitadas en esquemas que van desde la «invasión», la ocupación(con pago de servicios) pero que se rescataron, no fueron destruidas o si estaban dañadas fueron rehabilitadas»
Las 5 mil 230 viviendas restantes se encuentran destruidas y en condiciones que no permiten ser habitadas.
Una mínima parte que no supera las 200 viviendas se halla sujeta a un proceso legal y/o protocolo de adquisición a través de inmobiliarias que las adquieren.
Domínguez, advierte que durante los últimos años, las viviendas abandonadas son adquiridas por inmobiliarias por un costo que oscila entre los 80 a 90 mil pesos, para su reventa.
Las compañías, dijo que incluso las adquieren en «paquetes» para dedicarse a su remozamiento y colocarles nuevamente a la venta en el mercado inmobiliario por precios que van desde los 200 mil hasta 240 mil pesos, bajo esquemas de financiamiento ante el Infonavit o hipotecas bancarias.
SON UN PELIGRO PARA LA COMUNIDAD DEL SUR DE TAMAULIPAS
Rodrigo Mundo, Consejero y ex presidente de la asociación «Altamira , Arquitectos y Constructores » (ALTAC), advierte que cada vivienda sin ocupar representa un sitio ideal para convertirse en «guarida» para ladrones, para consumir alcohol, para pandilleros, en un basurero clandestino.
«Las casas abandonadas inmediatamente son saqueadas, son desvalijadas, es un problema que tiene muchas aristas en la zona y que son prácticamente de inmediato ocupadas por personas no deseadas en una comunidad».
En la mayoría de los casos, revela que tienen un costo mucho mayor para un sector o una colonia, debido a que la plusvalía de la colonia, sector o fraccionamiento se abarata ante la falta de demanda en el lugar, dadas las condiciones urbanísticas que presenta.
«Se abarata la plusvalía de un fraccionamiento, de un sector, porque los potenciales compradores no quieren habitar en un lugar que tiene mal aspecto, o casas destruidas o vandalizadas».
Representan, dijo , también un problema social, porque contribuyen a que las personas sean menos felices, porque habitan en un entorno «empobrecido» por las circunstancias.
La recuperación de los «cementerios de viviendas», necesita de acciones de los 3 niveles de gobierno, para poder solventar de manera integral.
«Los 3 niveles de gobierno: No vemos otra forma de que se pueda resolver. Por un lado se tiene que atender el tema legal de cada casa, el tema social, y el económico para lograr cambiar el rostro de los fraccionamientos afectados».
ESPERAMOS REGULARIZAR
Domínguez considera que es de suma importancia regularizar la vivienda en ocupación.
«Hay un proyecto , que esperamos que pueda ayudar a recuperar todas las casas que se hallan abandonadas. Hay buena fe de las personas que las ocupan, desde hace tiempo que esperan que pueda sentarse a platicar con ellos el INFONAVIT».
El representante social, añadió que se tiene previsto sostener una reunión con el INFONAVIT para establecer una mesa de negociación sobre las viviendas ocupadas desde hace años.
«Lo que pasa es que durante los últimos años, muchas personas ocupan estas viviendas de buena fe. Tienen contratados todos los servicios, pagan su luz, agua, teléfono, su credencial de elector, y creo que ahí podemos hacer todos los procesos legales».
Britania Quesada Castillo, suma 8 años en la ocupación de una vivienda, y reconoce que proveen el mantenimiento necesario y no se niegan a establecer un proceso de negociación con el propietario , ya sea una inmobiliaria, un particular o el INFONAVIT.
«Vivo aquí más de 7, 8 años, ocupó la casa, porque no tengo donde vivir y sí necesito. «,
Las personas en ocupa, explicó que no se niegan a cubrir el monto de la casa, si se les asigna un esquema por parte del INFONAVIT.





LA OCUPACIÓN DE CASAS ABANDONADAS CAMBIA EL ROSTRO DE UNA COLONIA
Ana Bertha Vizcaíno, delegada en el fraccionamiento «Haciendas I y II, dice que la ocupación de las casas abandonadas es por necesidad y por añadidura trae consigo mayor seguridad para los residentes.
«Hemos visto, seguido de cerca a las familias, que se acercan a pedir informes de las casas abandonadas. Llegan y colocan puertas, ventanas, introducen la luz, el agua, cambian la fachadas
En Haciendas II, fueron rescatadas 200 viviendas abandonadas que se encuentran en proceso legal para ver si se pueden adjudicar directamente.
«También nosotros vivimos en este lugar y lo que necesitamos es gente que realmente las necesite, y que no estén haciendo desmanes y otro tipo de situaciones. Hay como 200 personas, que tienen entre 5 a 8 años de habitarlas».
Argelia Reyes , dijo que son ocupadas por que hay necesidad de contar con una vivienda digna para su familia.
Los residentes , se encargan de mantener en buenas condiciones cada una de las áreas habitables de la construcción.
Por José Luis Rodríguez Castro
Expreso-La Razón




