TAMAULIPAS.- No era ni es un tema menor la disputa jurídica por el control de la Diputación Permanente.
Ayer se revelaron dos asuntos que ayudan a dimensionar la trascendencia política de la pelea por este órgano del Congreso de Tamaulipas.
Acaso el más importante y que volverá a ser objeto de durísimas discusiones y enfrentamientos al interior del Legislativo, sea la intención de la bancada del PAN de reformar la Ley Orgánica de la Administración Pública del estado para dar más facultades a la Unidad de Inteligencia Financiera y Económica.
En concreto, se propone agregar una fracción al artículo 26 para que la Secretaría de Finanzas esté obligada a “proporcionar a la Unidad de Inteligencia Financiera y Económica la información y documentación que le sea requerida, así como los accesos electrónicos de consulta a la información contenida en sus bases de datos y fuentes de información a las que se tenga acceso, con el fin de generar datos estadísticos, mapas patrimoniales que identifiquen factores de riesgo, así como patrones inusuales en materia financiera, fiscal, patrimonial y económica para el cumplimento de sus atribuciones”.
Es decir, la UIFE que a raíz de las reformas aprobadas el 30 de junio -las mismas que fueron invalidadas por el Tribunal Electoral de Tamaulipas, pero luego revividas por la suspensión de un magistrado del Supremo Tribunal de Justicia- pasó a formar parte de la Fiscalía General de Justicia, tendría acceso directo por vía electrónica al sistema de información de la Secretaría de Finanzas.
Los agentes de la Unidad de Inteligencia podrán revisar en tiempo real todos los movimientos financieros de la nueva administración estatal. Ni más ni menos.
Este asunto, que fue recibido ayer por la Diputación Permanente que sesiona sin la presencia de los diputados de Morena, tendrá que dictaminarse y llevarse al Pleno en una sesión extraordinaria.
La misma sesión que sería utilizada por la fracción del PAN para intentar aprobar el nombramiento de un nuevo magistrado del Supremo Tribunal.
Ayer mismo, llegó vía correspondencia la propuesta del Gobierno del Estado para que Rubén Salas Rodríguez sea avalado por el Pleno del Congreso.
Los dos temas que puso ayer sobre la mesa la Diputación Permanente serán manejados por la bancada panista con carácter de urgencia para que sean aprobados antes del 1 de octubre, cuando cambiará de manera radical el paisaje político de Tamaulipas.
Desde ahora se puede apostar que suscitarán un intenso debate que tendrá lugar en medio de la crisis que sufre la alianza del PRI y el PAN a nivel nacional.
Aunque los dirigentes locales han insistido en que la relación no está rota, será muy interesante ver hacia dónde se mueven los priístas en el umbral de la nueva alternancia política.
