TAMAULIPAS.- Pian pianito comienzan a llenarse las vacantes tras el relevo de gobernador y ayer tocó el turno de conocer la estructura con la que VICENTE HERNÁNDEZ NAVARRO operará en su calidad de titular la Secretaría de Salud.
Así es mis queridos boes, los rostros que llegan a las subsecretarías de dicha dependencia tienen un incuestionable historial como profesionistas de la salud, más allá de que si estuvieran en la campaña morenista, en Victoria son ampliamente conocidos porque han hecho incluso carrera política.
EDUARDO MARTÍNEZ BERNEA llega a la subsecretaría de atención médica, con la experiencia de haber sido el delegado del ISSSTE en Tamaulipas donde seguramente se empapó del manejo hospitalario en crisis total.
Ya ven que esos hospitales donde se atiende a la burocracia federal son verdaderos armatostes donde falta todo y sobra la grilla sindical, misma que le echó del cargo allá por el 2019. Antes, el médico internista había sido director del Hospital Civil de Victoria.
Otro conocido de la medicina en la capital, pero también harto movido en la política es el desde ayer Subsecretario de Planeación y Calidad, GABRIEL DE LA GARZA.
El médico fue alcalde en sus tiempos de priísta en San Fernando, por las mismas siglas fue diputado local y por ellas también candidato a diputado federal, hoy en Morena le dan chance de servir desde Salud.
En la Subsecretaría de Salud Pública el bueno es también desde ayer otro sobreviviente del ISSSTE, el doctor JOSÉ LUIS GARZA RUIZ, quien todavía este año era director de la clínica hospital del instituto en Victoria.
Como Subsecretario de Administración y Finanzas, de quien poco se conoce, es JOSE DE LA GARZA TORRES y el Comisionado Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS) es el doctor ALBERTO MOCTEZUMA CASTILLO.
Es, insisto un buen punto a favor en Salud, que no se asoman los intensos colores de Morena, sino que prevalece el perfil de la profesión, aunque no les guste a los recalcitrantes guindos.
Ahora que digo de un ex alcalde del PRI en el gabinete de Salud, hay que comentar que en la General de Gobierno de HÉCTOR VILLEGAS “El Calabazo”, a partir del 15 de este mes recibe su primera quincena como subsecretario el también ex alcalde priísta de San Fernando TOMÁS GLORIA REQUENA con una subsecretaría. Ahí por cierto ayer se comenzaron a pedir renuncias a burócratas con base de años.
Para hoy, según radio pasillo, se entregarán nombramientos en la Coordinación General de Comunicación Social que encabeza FRANCISCO CUELLAR y donde despachan entre otras periodistas GUADALUPE CONDE y SILVIA MEJIA.
Todavía falta que conozcamos muchos de los rostros que tienen en sus manos la tarea de la transformación de Tamaulipas como lo ha prometido AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.
Y como lo decía en una colaboración anterior, la deben tener muy fácil, porque hoy allá en la CDMX tienen un Congreso Federal donde se reparten los millones del presupuesto de mayoría morenista.
Allá también los de Morena del nuevo gobierno de Tamaulipas tienen a ERASMO GONZÁLEZ, presidente de la Comisión de Presupuesto, que este año tendría por primera vez la obligación de gestionar las obras que necesita la entidad, luego de 4 años sin bajar un solo peso partido por la mitad para beneficio de su estado.
Hay que recordar que ERASMO por el contrario, durante el gobierno panista de FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA se comportó como un enemigo de Tamaulipas y desde allá le recetó al Estado solo moches en el presupuesto.
Y obviamente, con un presidente de Morena, en ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, nada más hará falta de que pidan y se mandarán los recursos para la infraestructura que le urge a Tamaulipas.
¿Y Lupita Covarrubias?
La que no ha asomado la cabeza ahora que Morena manda en el gobierno de Tamaulipas es la senadora GUADALUPE COVARRUBIAS, siempre protagonista en la campaña, nos mostró sus dotes de bailadora en los videos de las fiestas en el departamento de OLGA SOSA.
Era una férrea crítica del gobierno cabecista y animadora de los mítines del ahora gobernador VILLARREAL ANAYA, pero de pronto no se le vio por ningún lado, no robó cámara en la toma de posesión, más bien estuvo discreta por no decir de bajo perfil. Algo pediría que no le dieron.