10 diciembre, 2025

10 diciembre, 2025

A 3 años de la rendición…

CONFESIONARIO / MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA 

Un día como hoy, pero de hace 3 años, el gobierno de la fallida Cuarta Transformación ‘confesó’ lo que ya sospechábamos desde un año antes: no le interesa combatir a los grupos criminarles del país; fue el día del Culiacanazo.
Así es mis queridos boes, era el 17 de octubre del 2019, casi un año después de haber asumido la ‘conducción’ del país y ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, que nada había hecho contra las bandas, públicamente doblaba las manos, se rendía y hacia rendir al Ejército y la Marina ante OVIDIO GUZMÁN, hijo de El Chapo.
Eran por ahí de las 14:30 horas del jueves, un jueves negro que marcó al gobierno de la 4T, que a partir de entonces es señalado por sus críticos como ‘amigo’ o por lo menos tolerante con los carteles.
Un convoy de militares se acerca a la casa de OVIDIO, logran detenerlo, pero aún en el interior de la casa del joven capo, fueron rodeados por varios cinturones de hombres fuertemente armados que para entonces habían convertido a Culiacán y a todo Sinaloa en el infierno.
Las balas de grueso calibre, granadas, autos quemados, carreteras bloqueadas, un penal allanado y liberación de varias docenas de reos mostraron que los del Cartel de Sinaloa, por lo menos en ese momento eran más poderosos y con mejor organización reactiva que los militares.
AMLO dio la orden de dejar libre a OVIDIO quien ya desde entonces tenía orden de captura con fines de extradición a Estados Unidos, lo reconoció y para justificarse dijo que con ello se evitó la muerte de decenas; al final el saldo fue de 11 nuestros y el capo libre y con el orgullo de haber doblegado a todo un gobierno y al presidente de la República.
La noticia del Culiacanazo le dio la vuelta al mundo, mientras los secretarios de Seguridad Pública federal y de la SEDENA, ALFONSO DURAZO; hoy gobernador de SONORA y LUIS CRESENCIO SANDOVAL se enredaban con las declaraciones sobre el vergonzoso episodio.
Que dejaron libre a OVIDIO porque no tenía delitos en México, dijo el ahora gobernador, cuando en el sitio de la detención, el hijo de El Chapo estaba fuertemente armado y su gente aterrizando a toda una entidad.
Que los militares que llegaron al operativo lo hicieron sin consultar a sus superiores, argumentó SANDOVAL y que lo hicieron sin preparación.
“(La actuación de sus militares fue) precipitada, con deficiente planeación, así como falta de previsión sobre las consecuencias de la intervención, omitiendo además obtener el consenso de sus superiores, es decir, del Gabinete de Seguridad», salió a decir el titular de SEDENA.
Como para hacer un control de daños, que resultó peor para la ya marcada relación de tolerancia hacia los carteles, AMLO unos meses después reitero: “Yo ordené que se detuviera ese operativo y que se dejara en libertad a este presunto delincuente”.
No era la única evidencia que nos lanzaría el gobierno de la 4T de que contra los malos ‘nada’ porque el 6 de marzo del 2020, rodeado de camionetas del Cartel de Sinaloa, en una gira por Badiraguato, AMLO fue tomado del brazo por el abogado de El Chapo que le indicó que atendiera a la abuela de OVIDIO y madre del Chapo.
Diligente y sumiso, se acercó a la camioneta donde estaba la señora CONSUELO LOERA para pedirle: “Te saludo, no te bajes… ya recibí tu carta» e intercambiaron algunas palabras rodeados de la gente que la cuida.
Ya cuando AMLO dijo que su gobierno también cuida a los narcos, que porque son seres humanos y que se refiera a El Chapo como Don Joaquin, entonces a nadie sorprendió, fue visto mas como un eco del Culiacanazo.
Eso si, aquella rendición ha dado frutos para el México ensangrentado que en dos años dejará AMLO como herencia trágica: más de 136 mil homicidios dolosos en 4 años, más que en ningún otro sexenio y si la cuenta sigue como va serán más de 215 mil arañando lo doble del sexenio de FELIPE CALDERÓN.
El gran problema con lo de Culiacán de hace tres años, es que para la mayoría de los gobiernos estatales ha sido una lección a repetir, cruzarse de brazos ante los embates de la delincuencia, ofrecer abrazos y ahorrar balazos, lo que en muchos puntos de la nación convirtió a los malos en la ‘autoridad’ y a los poderes constituidos en ‘monigotes’ que cuando mucho van y limpian los charcos de sangre y a veces cuentan a los caídos.

Los GOPES…

El viernes fueron privados de la libertad en la carretera La Ribereña el alcalde de Guerrero Coahuila y ocho de su comitiva. Lo último que dijeron esa noche después de las 23:00 horas es que dos camionetas de hombres armados los perseguían.
Al día siguiente la noticia estalló; los buscaban policías de Tamaulipas, Coahuila y Nuevo León, además de militares. Por Tamaulipas estaba el grupo policiaco de élite.
“Me es grato informarles que gracias al trabajo de las corporaciones de seguridad y a la coordinación de las autoridades de Tamaulipas, Coahuila y Nuevo León, el alcalde Mario Cedillo y las otras ocho personas desaparecidas, han sido encontradas sanas y salvas en una brecha rural en el estado de Coahuila”, publicó AVA en Twitter 
En el boletín del gobierno, donde se destaca la coordinación de todas las corporaciones destacan los del Grupo de Operaciones Especiales que ahora están bajo el mando del Fiscal IRVING BARRIOS.

POR MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA 

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