AMLO transita por el último tercio de su mandato. Solo restan dos años y uno se pregunta si tiene contemplado el gran golpe contra la corrupción o ha de heredar el asunto en las condiciones en que se encuentra. Es decir, tolerando la impunidad de aquellos que arruinaron la república, mismos que en el transcurso del sexenio son invariable tema de “las mañaneras”. Es discurso pues, sin concretar en hechos.
Siguen libres los responsables digo, y hasta la hora de escribir esta columneja no había señales de cambio, por lo tanto, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto pueden seguir disfrutando la vida con singular alegría en cualquier parte del mundo como premio a la inmoralidad con la cual condujeron al país mientras la galería se divierte con algunos ex funcionarios (as), que permanecen bajo el ojo de la justicia, pero a medias, a efecto de alimentar el escándalo y el morbo de vez en cuando.
Los más visibles, Emilio Lozoya y Rosario Robles.
El primero que en prisión hace valer su “pedigrí” de pertenencia a una clase que garantiza trato especial. Ladrón confeso de “cuello blanco” cuya situación los mexicas desconocemos a ciencia cierta. Lo último estuvo relacionado con su hermana Gilda Susana a quien recién se canceló la orden de aprehensión resultante de su presunta participación en el fraude con la compra-venta de la planta Agro Nitrogenados que en principio, produjo la detención (extradición de España) de Alonso Ancira dueño de Altos Hornos de México y después su libertad bajo la promesa de reparar el daño que asciende a 216 millones de dólares de los que, a dos años de distancia, solo ha abonado cincuenta y al parecer no pagará más por esos vericuetos de la ley que por lo general benefician a los delincuentes.
De la madre de Emilio (Gilda Margarita Austin) poco se sabe, salvo que permaneció en prisión domiciliaria por seis meses dictada en noviembre del 2020 y después le fue negado el amparo correspondiente a los mismos delitos imputados a su hija. En cuanto a la esposa del ex director de PEMEX, (Marielle Helene Eckes) al parecer se encuentra en su natal Alemania prófuga de la Fiscalía. Total, el único caso relevante en la lucha contra la corrupción aparece confuso y sin resultados por los que deba presumir el supremo gobierno.
Respecto a Rosario Robles Berlanga ya sabemos que su permanencia en prisión por tres años se convirtió en telenovela de gran aceptación entre las y los feministas que consideraban injusta su detención suponiéndola víctima de la 4T, olvidando su complicidad con los enjuagues saqueadores de Luis Videgaray (protegido por el Instituto de Tecnología de Massachusetts) y EPN. Olvidada por estos, la ex titular de la secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), hizo de su detención un drama que caló hondo en el sentimiento popular.
La señora no está libre de su participación en la “estafa maestra” donde es acusada del desvío de más de 5 mil millones de pesos, sencillamente permanece en prisión preventiva en su casa.
Quedamos en que después de cuatro años el combate a la corrupción no ha resultado lo exitoso que esperábamos, sin embargo, hay esperanza de que durante el resto del régimen pueda suceder algo extraordinario que obligue a los responsables del saqueo a enfrentar la ley. Conste que solo es esperanza que no confianza. Ojo, que si Claudia Sheinbaum hereda el problema no se andará con rodeos. Y si no, pa’l baile vamos.
LA VISITA DE AMLO
Es oficial la presencia de AMLO en la capital de Tamaulipas la tarde del martes y la mañana del miércoles, él mismo lo anunció el viernes último. Y dada la emergencia le acompañará el gabinete, al menos el primer día, después de lo cual sabremos en qué medida -y por cuánto- se apoyará a la administración encabezada por Américo Villarreal Anaya.
El presidente de México sabe de las condiciones en que se encuentra el estado, conoce la problemática cuya solución requiere la participación federal en todos los órdenes. Por lo pronto AVA cuenta con dos mil millones de pesos para enfrentar lo más urgente de aquí al fin de año. Claro que esto no es ningún regalo ni nada que se le parezca, simplemente es a cuenta de participaciones. (Hacienda no perdona por más afecto que AMLO tenga a la raza que durante varios sexenios le ha ido como en feria, pero bueno se agradece el gesto).
En este sentido, si los diversos funcionarios traen buenas intenciones, presupuesto y precisas instrucciones, deberán dar prioridad al rescate de varias ciudades que están pa’ llorar, iniciando por Victoria cuyo deterioro fue irreversible a partir de administraciones perfeccionadas en el jueguito ese de “matanga dijo la changa”, es decir, arrebataron lo que pudieron sin decir “¡agua va!”.
El asunto es que en Tamaulipas se conjugan todos los problemas al grado de que el supremo gobierno se ve obligado a intervenir como última instancia para salvar lo que resta de un estado urgido de respiración “boca a boca”.
SUCEDE QUE
Américo ha debido poner orden en algunas dependencias donde los y las titulares “se quisieron pasar de lanza” ignorando instrucciones superiores. No lo cuente, pero hay apuestas en cuanto a la permanencia de ciertos funcionarios (as) indisciplinados(as)…oiga, a propo, de pronósticos reservados la reunión del viernes entre la dirigencia del SNTE encabezada por Rigo Guevara y la secretaria Aimé Castillo, por la rudeza empleada no por otra cosa.
Y hasta la próxima
Por Max Ávila




