Tras señalar que se toma un “cóctel de pastillas”, el presidente Andrés Manuel López Obrador presumió que tiene buena salud ya que este fin de semana recorrió la Montaña de Guerrero y Puebla, “enfermito, enfermito pero todavía hay fuerza para seguir luchando”.
Durante la inauguración de la modernización de la carretera La Pera-Cuautla, instruyó a que se cumplan con todos los acuerdos con los comuneros ante las denuncias que aún hay pendientes. Llamó a que se abra de inmediato la carretera y la circulación, además de que hay “un acuerdo para que los pobladores no paren el paso en la caseta”.
También reconoció que tuvo que adelantar la inauguración “les acepté a sabiendas que todavía falta, porque si no vengo, no le meten más, ya saben ustedes, ahorita todavía están pintando, pero va a continuar”.
“Muchas gracias al gobernador de Morelos, siempre lo apoyo, pero el día de hoy lo apoyo más por lo que pasó anoche (ya que descalificaron al equipo de futbol América)”, expresó riendo.
Abordó salud propia y del país
En su discurso, el presidente dijo que tras el hackeo a la Sedena por el grupo autodenominado Guacamaya, el “bombazo” fue sobre su estado de salud y las enfermedades que padecen. “Claro que tengo achaques, ya estoy chocheando, esa fue la gran nota porque en los informes se da a conocer que me intervinieron en el hospital militar, pero estoy bien, tengo que tomarme unas pastillas, un cóctel de pastillas”, aseguró.
Tras detallar el recorrido que hizo por la Montaña de Guerrero y Puebla, expresó, “entonces, enfermito, enfermito, pero todavía hay fuerza para seguir luchando”. El titular del Ejecutivo Federal apuntó que ya que pasó ese “mal”, la pandemia de coronavirus, ahora esta ocupado de tiempo completo para lograr un sistema de salud que será los mejores del mundo, universal y de manera gratuita.
Por ello, afirmó que se trabaja para tener especialistas, medicinas y equipar los hospitales y las unidades de salud. Señalo que el modelo IMSS Bienestar, en donde se atiende a población sin seguridad social, ya está operando a 100 por ciento en Nayarit, Colima y Tlaxcala, y el próximo fin de semana se tendrá Sonora, Sinaloa y Baja California Sur.
Jorge Nuño Lara, encargado de despacho de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), explicó que esta obra de modernización se inició en 2011, pero se frenó por diversos amparos, reanudándose en febrero del año pasado. Detalló que se rehabilitaron 34.2 kilometros, con una ampliación de dos a cuatro carriles, tiene tres entronques, tres casetas de peaje con lo que se ahorrarán 30 minutos en el traslado.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO