CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Miles de victorenses abarrotaron los panteones municipales y privados al conmemorar el día de los Santos Difuntos luego de dos años de pandemia y restricciones, por lo que música, los convivios familiares y lágrimas se se hicieron ver durante la jornada.
En un recorrido por el panteón de la Cruz, el del Cero Morelos, también Jardines del Cielo, Parque Funeral del Refugio entre otros desde temprana hora abrieron sus puertas a familiares y amigos de los difuntos.
Aunque los panteones funcionaron desde las siete de la mañana, las florerías y negocios de comida se instalaron desde antes de las 4 de la madrugada, los cuales en todo momento tuvieron clientela y el mejor día en tres años.
“Se nos vendió casi todo, la mejor venta en tres años” dijo una comerciante instalado afuera del Cementerio de la Cruz, mientras que otros más del panteón del Cero Morelos confirmaron que registraron ventas con alza del 100 por ciento.
Comemos tamales porque eran los favoritos de mama
Como cada 2 de noviembre desde hace cuatro años, platica la familia Ángeles Mata que se ha reunido en la tumba de su señor padre Juan Manuel Ángeles García y la señora Magdalena Mata para disfrutar de una rica tamaliza y recordar viejos tiempos.
Hermanos, hijos y nietos conviven tradicionalmente, desde que su madre les inculco en vida visitar la tumba de su padre, ahora luego del fallecimiento de ella, honran lo que les inculco y tratan se seguir unidos.
“Cada año venimos y convivimos, traemos tamales porque era lo que le gustaba a mi mama, hacer tamales y traerlos y aquí estamos casi todo el día conviviendo y comiendo sus nietos y sus hijos”
La familia platica que aunque ellos no les gustan las fotografías, ni salir en los medios, a su señora madre si; por lo que accedieron a contar esta historia mientras juntos disfrutaban de un plato de tamales, salsa y sus respectivos frijoles.
Da servicio de rosario en el panteón
Juana de Lourdes Vega Puga es una victorense creyente que como cada año asistió a visitar a sus padres al panteón del Cero Morelos, pero en esta ocasión ofreció servicios de rezar rosario.
Dijo que esto debido a que está pasando por una difícil situación económica y sabe que muchas familias acuden el 2 de noviembre a orar por sus seres queridos por lo que solicita una pequeña ayuda a cambio de la oración.
La intención de rezar el rosario en un funeral, es porque se acude a María en su papel de intercesora para solicitar el descanso eterno del alma del difunto y ayudarla a elevarse al cielo. Es una manera de ofrecer sufragio por el alma del difunto.
La Iglesia cree que la Santísima Madre de Dios continúa en el Cielo ejerciendo su oficio materno, por eso es natural que los cristianos acudan a Ella para pedirle sus necesidades y confiarle sus preocupaciones.
Vienen ejidatarios
a limpiar tumbas
Jóvenes y adultos habitantes de ejidos como Benito Juárez, Victoria y colonias de la periferia madrugaron este 1 y 2 de noviembre para ofrecer el servicio de limpiar tumbas, así como mantenimiento y pintura.
“Llegamos desde las 7 dela mañana para ofrecer el trabajo, nos ha ido muy bien, los primeros visitantes madrugan, pero también nos quedamos hasta después de las seis de la tarde para ver cuánto trabajo nos sale” platica Víctor quien dice ser albañil.
Este trabajo aunque momentáneo, es importante para muchos victorenses quienes cada año se trasladan a los panteones municipales del Cero y la Cruz, pero también otros privados para ofrecer sus servicios.
Armados de talaches, machetes, pintura blanca, dorada y también cal, cada uno dice embolsar más de 200 pesos en este día, por lo que hay quienes se ponen de acuerdo para venir en grupo año con año.
Cabe citar que entre esos trabajadores hay niños y adolescentes de escasos recursos que ayudan a chapolear la tumba, limpiar o solo acarrear agua desde las fuentes que no siempre son cercanas.
Por Raúl López García
EXPRESO-LA RAZON