Medios de comunicación y “analistas” comprometidos con el neoliberalismo se escandalizan porque AMLO llamó “hipócritas, clasistas, cretinos, rateros y racistas” a quienes organizan la movilización a favor del INE el próximo domingo, entre los que destacan Vicente Fox y Felipe Calderón, operadores del fraude más vergonzoso que registra la historia moderna de nuestro país. Ellos se dicen “democráticos” pero no vacilaron en atentar contra el voto mayoritario en 2006.
Justo en “la mañanera” de este martes se recordó el papel desempeñado por algunos actores del hecho. En este sentido el Presidente volvió a mencionar a Eugenio Hernández Flores y las pláticas sostenidas con Elba Esther Gordillo quien lo incitaba a meter mano al proceso a fin de evitar el inminente triunfo del entonces candidato del PRD e impulsar al panista Calderón. Lo que ya sabemos sucedió para desconcierto de los tamaulipecos.
Operaba en nuestro estado Pedro Cerisola, secretario de Obras Públicas foxista, quien horas después del golpe azul agradeció al gobernador su colaboración con la sugerente expresión: “te pasaste”. Por su parte Geño justificó el halago diciendo que se trataba del regalo de un fino reloj como atención por algunas tareas cuya realización requerían apoyo federal. Por supuesto nadie se lo creyó y menos este columnista ante quien lo declaró.
El asunto es que la derecha saqueadora y corrupta se ha echado a cuestas la defensa del INE por la sencilla razón que así le conviene para seguir maquinando fraudes y realizar acciones contrarias a la transformación de la república. Ya sabéis que entre las reformas propuestas está la desaparición de los institutos estatales que por lo general están al servicio de los poderes locales, además de significar importante sangría a los dineros públicos. La idea es adelgazar en todo lo posible la burocracia electoral que resulta la más cara del mundo.
El INE está considerado por la 4T como el mayor cómplice en el manipuleo electoral además de rabioso adversario del supremo gobierno sobre todo a partir de la aprobación de la ley federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos cuyo artículo nueve señala: “Ningún servidor público recibirá una remuneración o retribución por el desempeño de su función, empleo, cargo o comisión igual o mayor a la que tenga derecho a recibir el presidente de la república”.
Tras publicarse la citada ley, el INE promovió la respectiva controversia constitucional que hasta la fecha permite que 123 funcionarios del mismo sigan cobrando más que el jefe de la nación. Los consejeros, por ejemplo, reciben casi 300 mil pesos mensuales libres de polvo y paja cada uno, además de una serie de prestaciones entre las que se cuentan: gastos de alimentación, seguro médico mayor personal y colectivo, (acaban de contratar otro por 300 millones extensivo por varios años), vehículo, chófer, combustibles, prima vacacional, vales de despensa etc. Desde luego viajan a donde los invitan, siempre en primera clase, y entre los últimos lugares visitados se encuentran: EU, Rusia, Italia, Eslovaquia, Austria, Suiza, Argentina, Perú y otros. Destaca la presencia del consejero presidente Lorenzo Córdova en Brasil en calidad de “observador” de las elecciones donde resultó triunfador Lula Da Silva.
No hace mucho tal funcionario paseó por Venecia con cargo a los contribuyentes mexicas, quesque para asistir a la sesión plenaria de una comisión europea donde aprovecharía “para sostener entrevistas con autoridades electorales de Bruselas, Bélgica”. Entonces se hospedó en el hotel Gardena, de los más lujosos cuya publicidad señala: “exquisita decoración y elegante mobiliario crean una combinación perfecta del gusto moderno y atmósfera propia de la república de Venecia del siglo XVIII”. Este es el INE que la reacción pretende conservar para desgracia de la república.
LOZOYA, OTRA VACILADA
El ex director de PEMEX ya le tomó la medida a la justicia. Y es que los casos de corrupción donde aparece involucrado por el contrario de ser aclarados cada vez se enredan más. Cualquiera entiende que Emilio Lozoya gana tiempo y no extrañará que cualquier día de estos amanezcamos con la noticia de su exoneración o cuando menos al retorno de la situación guardada antes de aquella noche del 9 de octubre del 2021 en que la periodista Lourdes Mendoza tomara las sorprendentes fotografías donde aparece degustando “pato laqueado”, el platillo más caro del restaurant Hunan de las Lomas de Chapultepec, acompañado de varias “distinguidas” personas.
El asunto es que las diligencias relacionadas con Odebrecht y Agro Nitrogenados se posponen una y otra vez como si existiera un acuerdo no escrito tendiente “a enfriar” lo que alguna vez fue la referencia más escandalosa en el presunto combate a la corrupción. Ahora mismo las pruebas se diluyen con el manoseo de documentos comprometedores y la desaparición de testigos, (unos huyendo y otros fallecidos), mientras la impunidad se convierte en patrimonio de la familia del acusado. En este sentido poco o nada se sabe de Gilda Austin su madre, Gilda Susana y Marielle Eckes, hermana y esposa respectivamente también “metidas en el ajo”.
Total, que la 4T no puede con la corrupción. Y ni modo que sea invento.
SUCEDE QUE
¡Regresa “truko”, te perdonamos!
Y hasta la próxima
Por Max Ávila