CIUDAD DE MÉXICO .-Durante las fiestas decembrinas las personas tienden a reunirse más seguido, comer más y también, ingerir más bebidas alcohólicas debido a la gran cantidad de fiestas a las que asisten. Y es que en estas fechas, pocas personas prestan atención a la báscula o a la cantidad de alcohol en la sangre, lo que podría representar un riesgo si se descuida la salud, ya que las consecuencias podrían presentarse más adelante.
De acuerdo con la Asociación Estadounidense del Corazón, las muertes por infarto son más probables durante la temporada de vacaciones de invierno que en cualquier otra época del año, específicamente entre Navidad y Año Nuevo, momento en que se presenta el «síndrome del corazón festivo», ya que la gente tiende a consumir una mayor cantidad de alimentos y bebidas, pero hace menos ejercicio y se deja de prestar atención a lo que realmente necesita el cuerpo.
En diciembre algunas personas tienden a comer y tomar en exceso.
¿Qué es el «síndrome del corazón festivo»?
Fue en la década de 1970 cuando los médicos nombraron «síndrome del corazón festivo» al efecto que tienen las borracheras de las festividades, ya que notaron que pacientes sanos llegaban a urgencias en estas fechas con fibrilación auricular o ritmo cardiaco irregular luego de haber bebido en exceso durante estas festividades.
Y es que este síndrome le ocurre a cualquier persona, ya sea en aquellos de edad avanzada o en gente más joven que presenten fibrilación auricular inducida por el alcohol, que es un ritmo cardiaco rápido y caótico, de acuerdo con Gregory Marcus, profesor de medicina en el departamento de cardiología de la Universidad de California, campus San Francisco, es una de las afecciones cardiacas más frecuentes.
Para pasar unas festividades tranquilas es importante prestar atención al cuerpo.
En este contexto, cabe recordar que las personas con estos padecimientos no tienden a presentar
síntomas, según Hugh Calkins, profesor de Cardiología de Johns Hopkins Medicine, sin embargo, los que sí presentan síntomas llegan a tener:
•Palpitaciones agitadas o fuertes
•Dolor torácico o dificultad para respirar
•Algunos sufren fatiga extrema incluso se desmayan
Los peligros de esta afección
Cabe destacar que el índice de mortalidad por fibrilación auricular lleva más de dos décadas en aumento, por lo que es importante prestar atención a los síntomas, ya que esta afección aumenta el riesgo de sufrir una apoplejía (derrame cerebral) y se ha relacionado con la demencia, además de la insuficiencia cardiaca.
La comunidad científica aún busca entender cómo daña exactamente el alcohol al corazón, aunque existe una teoría de que supuestamente, el alcohol provoca alteraciones en el sistema nervioso, el cual suele regular el ritmo cardiaco asimismo, el exceso en el consumo de éste puede alterar las señales eléctricas del corazón, las cuales coordinan la contracción de las células cardiacas.
De esta forma, hay estudios que señalan que una sola copa al día puede aumentar un 16 por ciento el riesgo de padecer fibrilación auricular, así lo ejemplifica Calkins: «Si en un día cualquiera la probabilidad de que mañana presentes fibrilación auricular es de una entre mil, entonces si esta noche bebes una cerveza o una copa de vino, la probabilidad quizá sea de tres entre mil”.
Finalmente, cabe recordar que no se necesita esperar a que sea fin de año para acudir al médico, pues cada segundo cuenta cuando se trata del corazón y notar alguna alteración en el latido o dolor en el pecho, por lo que hay formas de prevenir un daño mayor si se optar por disfrutar y beber:
Hidratarse: beber un vaso de agua entre cada bebida será vital, ya que la deshidratación aumenta el riesgo de padecer este síndrome.
No abandonar los medicamentos: disfrutar de estas fechas no debe de estar peleado con ser responsable con los medicamentos que se deben de tomar diariamente o de forma crónica, ya sean para el corazón, la presión arterial o de otro tipo.
Ejercitarse: siempre es recomendable hacer un poco de ejercicio que no hacerlo, por lo que se recomienda tomarse unos minutos para este fin, quizá no sea la rutina completa, pero una caminata puede ser beneficiosa.
Controlar el estrés: a pesar de estar de vacaciones, mucha gente tiende a estresarse, por lo que se recomienda tomar todo con más calma, hacer ejercicios de respiración o bien, prestar atención al cuerpo, pues es el primero en lanzar señales cuando algo genera estrés, ya sea una reunión, el tráfico, el mal clima, o un asunto inesperado, pero para tener un corazón sano, es necesario reducir los niveles de estrés.
Con información de Heraldo de México.