La senadora panista Lilly Téllez García y el aún consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, han logrado acaparar los reflectores de los medios de comunicación no solamente por el golpeteo sistemático dirigido cotidianamente contra el presidente López Obrador, sino también porque los dos servidores públicos son racistas.
En ocasiones distintas, expresaron su desprecio por la cultura y las tradiciones de los pueblos y naciones indígenas del país. Como se recordará, al jerarca del instituto nacional electoral le grabaron una conversación telefónica en la que se burla de la manera en que habla el pueblo Chichimeca.
“No voy a mentir, te voy a decir como hablaba ese cabrón: “Yo jefe gran nación Chichimeca, –dice tratando de imitar al líder indígena Mauricio Mata– vengo a Guanajuato. Yo decir a ti, a diputados para nosotros o yo no permitir tus elecciones”.
“Yo no sé, comentó Córdova a su interlocutor, el secretario ejecutivo Edmundo Jacobo Molina, si sea cierto y hablaba así ese cabrón…pero vio mucho Llanero Solitario, cabrón… nada más le faltó decir: Yo gran jefe Toro Sentado, líder chichimeca, no mames cabrón, no mames,…
No, no, no, de pánico, cabrón. O acabamos de aquí divertidos o acabamos en el siquiatra”. Como Córdova, la legisladora Téllez, tiene un menosprecio similar de los pueblos indígenas.
El 2 de noviembre de 2022, AMLO encabezó un homenaje a las víctimas de ese segmento de la población del covid 19, en el que el primer mandatario se hizo una “limpia” al estilo de los mazatecos y la legisladora reaccionó casi igual que el consejero electoral. A través de su cuenta de tuiter comentó: “no es un homenaje a las tradiciones, es la idealización de la ignorancia.
México necesita ciencia, no superchería”. Doña Tere, mujer indígena, respondió que conminaba a la senadora a conocer sus raíces indígenas, “tiene mucha pobreza espiritual, –comentó–no sé a quién sirve, yo sirvo a mi pueblo”.
Con actitudes y reacciones como las aludidas, en vez de defender las causas políticas de Acción Nacional y de la derecha política mexicana, Lilly y Córdoba deberían de afilarse al partido ultraderechista español VOX, homofóbico, anti lésbico-gay, anti-matrimonios igualitarios, antifeminista y anti-aborto, en el que consideran a los pueblos indígenas como seres inferiores.
Es en una asociación política de esas características en donde seguramente tendrían una exitosa trayectoria.
Como es del dominio público, la feroz y rabiosa comunicadora metida a servidora pública firmó la “Carta Madrid” de la agrupación de la madre patria, que dice que ya rompió porque no comulga con las radicales banderas de lucha que esta enarbola, durante una reunión que, junto con otros senadores panistas encabezados por el coordinador parlamentario Julén Rementería, sostuvieron en septiembre de 2021 con el dirigente del partido hispano, Santiago Abascal, en las instalaciones albiazules del Senado.
Para cerrar, las autoridades electorales de Tamaulipas igual que los candidatos de Morena, José Ramón Gómez Leal, del PAN, Imelda Sanmiguel Sánchez, y del Verde ecologista, Manuel Muñoz Cano, llaman a los ciudadanos tamaulipecos a acudir a votar el próximo domingo 19 de febrero para elegir al nuevo senador que representará a la entidad en lo que resta a la gestión que llegará a su fin el 2024. Hay que ayudar a vencer al abstencionismo.
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